La Guardia Civil ha desarrollado la operación ‘Antecesor’ establecida para esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte de una anciana, ocurrida en el mes de septiembre en un centro geriátrico San Isidro de Yecla, que ha culminado con 12 personas investigadas como presuntas autoras de los delitos de homicidio por imprudencia y de encubrimiento.Según explica la Benemérita, la investigación se inició cuando los familiares de una anciana, fallecida en un centro geriátrico, denunciaron ante las autoridades judiciales las supuestas irregularidades que concurrieron en su muerte, de las que tuvieron noticia a través de una serie de comunicados anónimos.El Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 2 de Yecla ordenó que especialistas en Policía Judicial de la Benemérita investigar el óbito para aclarar si, pese a que se certificó su muerte natural, la anciana falleció fuera de su habitación donde, a priori, debía encontrarse durmiendo.
Investigación
La Guardia Civil obtuvo la documentación aportada tanto por la gerencia del centro socio-sanitario, como de otros organismos oficiales de inspección hasta averiguar la identidad de los empleados que, en la tarde noche del día en que la mujer falleció, se encontraban trabajando en la residencia.Los testimonios y el resto de indicios que los investigadores fueron recopilando permitieron detectar ciertas incongruencias que alumbraban a comportamientos irregulares de algunos de estos empleados, hasta el punto de deducir que la muerte no se produjo en la habitación de la anciana, si no que lo fue en el parking del recinto geriátrico, como anunciaban los anónimos.
Varias horas buscándola
Según se desprende de la investigación, la cronología de los hechos se inició a media noche cuando la mujer, que debía encontrarse durmiendo en su habitación, desapareció. Al parecer, los empleados la estuvieron buscando hasta bien entrada la madrugada, momento en el que la hallaron ya sin vida en el aparcamiento de la residencia.Los indicios obtenidos por los investigadores han permitido averiguar que, «con la supuesta intención de ocultar a la familia esta circunstancia, trasladaron el cadáver hasta su habitación, lo asearon y avisaron entonces a los servicios médicos de urgencias», aseguran desde la investigación.La operación ‘Antecesor’ ha culminado con la investigación de 12 personas, todas ellas empleadas, como personal sanitario y de dirección, del centro geriátrico. A 10 de ellas se les atribuye la presunta autoría de delito de homicidio por imprudencia y, al resto, de encubrimiento.Las diligencias instruidas han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Yecla.
Sin irregularidades
Los hechos ocurrieron en septiembre de 2022. Entonces, desde la dirección de la empresa que gestiona la residencia privada se aseguró a varios medios de comunicación que se iba a abrir una investigación interna para aclarar lo sucedido en este caso.
Por su parte, la consejería enconces consejer de Política Social, Isabel Franco, aseguró a elperiodicodeyecla.com que en la última inspección realizada a la Residencia San Isidro de Yecla de marzo de ese mismo año y no se detectó ninguna anomalía. Además, la entonces consejera dijo que tampoco se habían recibido quejas en estos últimos meses que indicaran mala praxis en el centro situado en la Umbría del Factor.
Que los empleados y sobre todo la gerencia del centro vayan buscando buenos abogados penalistas pues tienen un horizonte muy sombrío.