La Consejería de Política Social quiere saber qué hay de cierto en las graves acusaciones remitidas en una carta anónima. Una empleada de la residencia de ancianos San Isidro de Yecla asegura que la dirección del centro ordenó al personal cambiar la versión de la muerte de una anciana que falleció en su habitación, aunque realmente lo habría hecho en el aparcamiento de las instalaciones del centro.Según relata ese escrito, la anciana, a la que pone nombre apellidos y fecha de la muerte, apareció muerta a las dos de la madrugada en el aparcamiento de la residencia, aunque el centro aseguró que lo hizo en su cama por causas naturales. Según la empleada, después de cenar, la anciana se trasladó al aparcamiento de la residencia porque la puerta de acceso no estaba cerrada y nadie se percató de la salida de la mujer. Horas después, sobre las 2 de la madrugada, notaron su ausencia en la habitación. Fue entonces cuando el personal empezó a buscarla hasta que la encontró tirada ya muerta en el parking de las instalaciones. Al parecer, y según relata ese escrito, la mujer cayó al suelo dándose un golpe y falleció.Según el escrito, la dirección del centro llamó a dos o tres auxiliares para que fueran a la residencia y les dio órdenes de meter el cuerpo ya sin vida dentro de su habitación para asearlo. Entonces llamaron al 112 asegurando que la anciana había tenido una muerte natural en su habitación y se había caído de la cama.Siempre, y según la trabajadora anónima, al día siguiente, en el centro se llevó a cabo una reunión de emergencia con todos los trabajadores donde “se nos insultó y amenazó con despedirnos si hablábamos con alguien de fuera o entre nosotros sobre lo sucedido”, expresaLa autora del escrito dice que es una mujer que no cede a las amenazas y no piensa tener remordimientos, ni participar en este tipo de actos.
La residencia
En varias ocasiones, elperiodicodeyecla.com ha llamado a la residencia y al teléfono del director intentando recabar la versión de los hechos y una posible contestación a la carta remitida por esta empleada. Sin embargo, hasta el momento no hemos podido contactar con ninguno de los responsables.La que sí ha reaccionado de inmediato es la Consejería de Política Social que ha dado orden al servicio de inspección para que abra expediente informativo sobre estos hechos que relata el escrito de esta empleada que quiere permanecer en el anonimato “para protegerme a mí y a mis compañeras”.Desde Política Social explican que en la última inspección realizada a la residencia San Isidro de Yecla el pasado mes de marzo no se detectó ninguna anomalía, cerrándose el trámite indicando un correcto funcionamiento. Además, aseguran que no han recibido queja alguna respecto a la residencia San Isidro estos últimos meses que indiquen una mala praxis.
Por su parte, fuentes próximas a la familia confirman «la sorpresa» que ha supuesto el conocer el relato de la trabajadora para la familia de la anciana fallecida, aunque no ha trascendido si van a pedir explicaciones a la dirección del centro.
Los que sí han pedido reunirse con la dirección del centro son familiares de algunos residentes ante las noticias que les han llegado sobre este caso.