Hay juegos que nunca pasan de moda. Tal vez por su originalidad, quizás por los recuerdos, o por su enorme sencillez. Cada año aparecen nuevas opciones para disfrutar de los juegos de siempre, aquellos que tienen décadas de antigüedad y a los que muchos habíamos jugado con consolas, en el PC o en alguna máquina de Arcade. Para volver a pasar buenos ratos con estos títulos, existen una multitud de emuladores, portales de internet o reediciones. Y es que las empresas de esta industria saben bien que la nostalgia vende. Eso no significa que muchos de los desarrolladores de juegos, como los que aparecen en el listado de Vegasslotsonline ES, no estén enfocados en lanzar los productos más modernos e innovadores posibles; de hecho, se están utilizando las tecnologías más punteras, como la inteligencia artificial, el Blockchain o la realidad virtual, para crear juegos de última generación.
Clásicos que vuelven
Eso sí, siempre hay un pequeño lugar en el corazón de un “Gamer” para recordar aquellos videojuegos que son parte de nuestras vidas. Uno de los métodos más habituales para acceder a estos tesoros es a través de los emuladores. Es decir, programas que recrean una interfaz de consola antigua y que incorporan varios títulos de aquella época, con la posibilidad de descargar otros tantos. Es bastante habitual, desde hace años, que los usuarios los instalen en el ordenador. Pero la novedad, reciente, es que ahora Apple está permitiendo la existencia de estos programas en su tienda oficial, para instalarlas en los iPhone; en este caso, para producciones clásicas de Nintendo; concretamente, de la popular e inolvidable Game Boy. Esta consola portátil fue una auténtica revolución en su lanzamiento, en el año 1989, ya que permitía llevarla a cualquier lugar y disfrutar donde fuera de sus títulos, como el incunable Tetris o los siempre entretenidos Donkey Kong, Super Mario Land o Castlevania. Pero no todo se reduce a la Game Boy o a Nintendo. Son muchos los juegos que impresionaron a diversas generaciones y que hoy se pueden encontrar, mediante estos emuladores o, incluso, directamente en el navegador de internet, a través de diversas plataformas. Algunas de ellas están especializadas en épocas concretas, como los 80´s y los 90´s; otras, acogen a los más míticos juegos de todos los tiempos, como Pac-Man, Double Dragon y hasta una versión en Flash de Street Fighter.
Experiencias inolvidables
Lo de Street Fighter merece un capítulo aparte. Para muchos, fue una auténtica revelación, por la variedad de personajes, por las habilidades especiales de cada uno, su jugabilidad y sus gráficos. Fue rompedora en su época y ha quedado en la retina de muchos aficionados a los videojuegos. Su creadora, Capcom, ya ha estrenado su sexta entrega. Este videojuego abrió la puerta a otros títulos de obligada referencia, como Mortal Kombat o Tekken. Evidentemente, todos tiene su favorito; pero el original es capaz de trasladarnos, con mayor efectividad, a aquellas máquinas de Arcade de hace 30 años. Y, ya que estamos “metidos en faena”, ¿por qué no homenajear a los “shooters” pioneros? Los juegos de disparos en primera persona no sólo enamoraron a toda una generación; además, están más vigentes que nunca, con marcas actuales como Counter-Strike o Call of Duty. Pero, antes que todos ellos, llegó Doom. Corría el año 1993 cuando apareció este título para PC. Visto sin perspectiva, los gráficos nos parecerán muy simples y algo limitados. Pero es que fue hace más de 30 años. Después llegarían Quake o Duke Nukem. Y, más tarde, sagas como Call of Duty o Counter- Strike. En la actualidad, muchos de los juegos beben, como es lógico, de estos precursores. Pero su impacto no se debe, únicamente, al hecho de haber sido pioneros en diversos géneros, o de contar con menos recursos para crear productos atractivos; para muchos de los que hemos vivido diversas épocas, queda ese punto especial, el hecho diferencial, que permitió que estos juegos entrasen en nuestra vida. Una extraordinaria creatividad que va más allá de la huella del tiempo. Afortunadamente, en la actualidad la gran mayoría de ellos están disponibles en diversos formatos. Y como ocurre con las grandes películas clásicas de Hollywood, nunca llegan a cansarnos.