La inauguración de la rehabilitación de la capilla de la Virgen de las Angustias quedará para la historia de la ciudad ya que es una de las joyas del patrimonio histórico de Yecla que vuelve a lucir con esplendor.Se pone así fin a un extenso proceso de restauración que se llevó a cabo en el edificio adjunto a la Iglesia de San Francisco, tras más de un año de arduas labores de rehabilitación y décadas de gestiones hasta que se ha podido abrir de nuevo al público.El acto de apertura de las puertas de la capilla contó con la presencia de diversas personalidades, entre las que destacan el Delegado del Gobierno, Francisco J. Jiménez; el Consejero de Presidencia, Portavocía y Acción Exterior de la Comunidad Autónoma, Marcos Ortuño; la alcaldesa de Yecla, Remedios Lajara; el vicario parroquial de la Basílica de La Purísima, en representación de la Diócesis de Cartagena; así como los representantes políticos del Ayuntamiento de Yecla y miembros de asociaciones culturales de la ciudad.FOTOS: José Azorín
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Historia de una puesta en valor
La primera fase de la restauración de este complejo se completó en 2014, centrada en la Iglesia de San Francisco, una edificación histórica que data de finales del siglo XVI. En 2021, se llevaron a cabo obras de emergencia, con el apoyo financiero del Gobierno Regional, que ascendió a un total de 225.000 euros para abordar reparaciones en la cubierta y la consolidación de bóvedas y arcos.La alcaldesa de Yecla, Remedios Lajara, expresó su compromiso con la preservación del patrimonio cultural de la ciudad y resaltó el esfuerzo conjunto para lograr la reapertura de la Capilla de la Virgen de las Angustias. Este proyecto fue una prioridad para varias administraciones municipales y recibió financiación a través del programa de Conservación del Patrimonio Histórico Español del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. La inversión total ascendió a 884,500 euros, de los cuales el Ayuntamiento de Yecla aportó el 30%.
Camarín de la Virgen
Uno de los aspectos más destacados de esta intervención fue la restauración del camarín de la Virgen de las Angustias, una obra que se llevó a cabo en 1769 y que es uno de los atractivos del complejo. Los trabajos realizados en los últimos meses incluyeron la consolidación de la estructura y la recuperación de elementos ornamentales, pinturas y azulejos valencianos, que decoran el zócalo con motivos relacionados con la Pasión de Cristo y diseños florales geométricos.La alcaldesa Remedios Lajara subrayó la importancia de este logro, calificando la capilla como «la joya más desconocida de los yeclanos», ya que estuvo cerrada durante décadas. Con su restauración, se ha completado un círculo que comenzó en el siglo XVIII, cuando los habitantes de Yecla se esforzaron por construir esta joya arquitectónica, y los del siglo XXI se han empeñado en devolverle su antiguo esplendor.
Visitas
La inauguración de la capilla culminó con una bendición y misa, permitiendo que el lugar vuelva a ser utilizado para el culto después de más de 50 años de inactividad. Para celebrar esta apertura, se llevarán a cabo jornadas de puertas abiertas durante el sábado y el domingo, con explicaciones proporcionadas por el restaurador de bienes culturales, Alberto Martínez Pascual, que pueden reservarse a través del sitio web municipal www.yecla.es. Además, durante el fin de semana, la capilla estará abierta al público en horario de 18:00 a 20:30 horas.
¡Hombre! El gabinete García -Guisado, el del cartel anunciador de las fiestas, también está aquí ¡Que casualidad! ¿No?
Ha quedado muy bien la rehabilitación gracias al Gobierno de España, que no se olvide, una pega son las cabezas dque hay en la hornacinas de la Virgen, ahí han metido la pata, es horroroso, debían haberlas puesto en otro sitio, menos vistoso y que no de miedo.
Otra iglesia (otra!) es justo lo que este pueblo necesitaba para encarar el futuro con optimismo, claro que sí. Al final a la alcaldesa le va a faltar tiempo (y mantillas) para estar en todas las misas, procesiones, rogativas y festejos varios… Todo sea por el servicio público.