Este año no es el granizo, pero sí la ausencia de lluvias. Los cultivos de la comarca del Altiplano no han tenido que padecer en este año, -y hasta la fecha-, ninguna tormenta de pedrisco. Todavía se acuerdan que el año pasado fueron hasta cinco las tormentas de granizo que cayeron y de graves consecuencias, por el gran tamaño de la piedra-, lo que ocasionaron una merma de más del 30% en sus producciones. Pero, en esta ocasión se enfrentan a los adversos efectos de la sequía.
Cereales, vid, árboles frutales y almendros, que son los cultivos tradicionales de esta comarca del norte de la región de Murcia, ya sufren las consecuencias de la falta de precipitaciones desde el mes de marzo. La tierra se encuentra bastante seca, los cultivos padecen el denominado estrés hídrico por la falta de agua, lo que se traducirá en una cosecha reducida y de tamaño pequeño. Según los cálculos de los sindicatos agrarios, se prevén graves pérdidas en el secano, con un 20% menos de almendra y casi un 50% de oliva, si la lluvia sigue sin llegar.
En los siete meses transcurridos de este año, en algunos parajes apenas si se han recogido en sus tierras unos 20 litros de agua por metro cuadrado, una cantidad totalmente insuficiente para que los cultivos se desarrollen con normalidad. De registrarse algunas precipitaciones importantes en este mes de agosto, la situación podría cambiar algo, lo agricultores no dejan de mirar al cielo, implorando las tan necesarias lluvias, que remedien esta situación tan desoladora por la falta de precipitaciones. Algunos afectados, ya con cierta edad, quieren que las lluvias lleguen en agosto para hacer bueno el refrán que dice “tormentas en el mes de agosto, buenos racimos y mejor mosto”.
Las plantaciones en secano ya sufren el denominado estrés hídrico, por la pérdida de humedad de los suelos, como consecuencia de las altas temperaturas que se están registrando y por la falta de agua. También las parcelas de regadío notan la larga ausencia de precipitaciones.
La sequía está marcando la producción de los cultivos en los municipios de Yecla y Jumilla, principalmente en viñedos porque la uva no termina de desarrollarse y la vendimia se verá adelantada sobre su ciclo normal. A los olivos se les está cayendo parte de su cosecha, y en los almendros o en los árboles frutales la producción será más reducida y de poco tamaño, lo que hace más difícil su comercialización.
El dirigente del sindicato agrario de la Coag-Ir en el Altiplano, Pedro García, anuncia que las consecuencias de la sequía en los viñedos, “si no llueve en este mes de agosto, será importante en cuanto a la cantidad, porque se va a registrar una merma considerable en la cosecha, aunque la ausencia de enfermedades vegetales, porque no ha habido problemas de oidio, mildiu, ni de pedrisco, lo que propiciará una estupenda calidad”. García señala que “en el caso de la vid, la uva no engorda y será de grano pequeño, como le gusta a los enólogos, aunque a los productores no les supone un beneficio por la falta de peso, por lo que obtendrán un precio más reducido”.
En la comarca del Altiplano se cultivan actualmente más de 16.000 hectáreas acogidas a denominación de origen, de las que casi 10.000 corresponden al término municipal de Jumilla y 6.400 hectáreas al de Yecla.
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Acuíferos sobrexplotados
Los agricultores de Yecla y Jumilla denuncian que las reservas de los acuíferos de esta comarca, que son compartidos con municipios de la provincia de Albacete y otros de Alicante, siguen con los mismos problemas de sobrexplotación. Los niveles están bajos, lo que es preocupante. Una situación agravada por la sequía, que impide su recarga natural por la falta de lluvias.
El responsable de Agricultura de la Coag-Ir, Pedro García, se hace necesario exigir a los distintos gobiernos la necesidad de que se solucionen las aportaciones hídricas externas, mediante trasvases. En esta zona se considera que la aportación más factible, por la cercanía y la orografía del terreno, sería la procedente del Júcar-Vinalopó, y en justa correspondencia al agua que se comparte con la comunidad valenciana.
Para los agricultores del Altiplano, la situación de los acuíferos de Yecla y Jumilla todavía puede ser más crítica, porque la Unión Europea ha dado de plazo hasta el año 2027, para que quede solucionado el problema del abastecimiento agua, porque a partir de entonces estos recursos hídricos subterráneos quedarán racionalizados, para favorecer su recarga. El Altiplano es la única comarca de la región de Murcia que no recibe aportación de la mancomunidad de los Canales del Taibilla, por lo que su abastecimiento hídrico, tanto para el consumo humano como para los cultivos agrícolas, proceden de sus aguas subterráneas.
¿que hacen construyendo un pantano por el fator?, van a terminar secando yecla.