Aunque los pasos hacia una salida luminosa del túnel que ha supuesto la expansión del COVID-19 se dan cada vez de forma más rápida, todavía es necesario prestar mucha atención a las diferentes medidas de prevención que han impulsado la caída del número de contagios en nuestro país. Con el avance de las diversas fases de desescalada, en las que cada vez entran en juego un mayor número de personas que pueden desenvolverse con más libertad a medida que se superan las diferentes etapas, es imprescindible mantener todas las disposiciones que ayudan a contener la propagación del virus, desde las indicaciones en materia de higiene y sanidad, hasta la toma de decisiones que pueden aportar cosas positivas en esta situación, como la instalación de puertas antipánico y de emergencia. Al hilo de lo comentado sobre la instalación de diferentes modelos de puertas que puedan servir de utilidad para luchar contra la expansión de la pandemia, es realmente importante comentar los diferentes beneficios que la instalación de puertas automatizadas puede aportar en esta situación. Ventajas de las puertas automatizadas en la lucha contra el COVID-19 Uno de los aspectos más relevantes y positivos que pueden aportar este tipo de instalaciones para intentar frenar el número de contagios es que, efectivamente, son puertas automáticas. Aunque pueda parecer una obviedad, el funcionamiento de estas puertas evita en su totalidad el contacto que se necesita para abrirlas, ya que funcionan mediante sensores de proximidad. Desde el principio se ha destacado la vital importante que tiene una profunda y meticulosa higiene de las manos para evitar los contagios, ya que, si estas no están higienizadas, pueden provocar la propagación al entrar en contacto con diversas partes vulnerables del cuerpo humano, como la boca o los ojos. Gracias a los mecanismos de apertura automática de este tipo de puertas, se evitará el contacto directo con posibles focos de infección, lo que redundará en una mejor y más efectiva prevención. También hay que destacar la importante ayuda que suponen en cuestiones de accesibilidad, tanto a la hora de facilitar el acceso a personas con movilidad parcial o totalmente reducida, como a la hora de mejorar el control que es necesario tener de dicho acceso para no superar los aforos permitidos. Mantener las distancias de seguridad continúa siendo una prioridad absoluta, y restringir y controlar el acceso mediante puertas automatizadas puede ser una solución idónea. Por último, aunque no menos importante, se debe resaltar el extra de confort y comodidad que las puertas automáticas generan en determinados ambientes de trabajo. Por ejemplo, en los diferentes hospitales y residencias que han visto tremendamente alterado su funcionamiento habitual por la proliferación de casos de coronavirus, las puertas automatizadas sirven como aislante de determinadas estancias, a la vez que facilitan un acceso limpio a estas cuando es necesario. Otras situaciones laborales que se ven beneficiadas por la instalación de este tipo de complementos son las de los almacenes o demás negocios que necesitan de un continuo movimiento para la realización de las tareas propias del trabajo, ya que con la automatización se genera un impacto positivo tanto a nivel de organización como de mantenimiento de las medidas de higiene necesarias.