Así como las mujeres tienen su traje o blazer, que históricamente era una prenda creada para los hombres, pues los caballeros para verse elegante con el pasar de los años han tenido prendas elegantes.
En el caso de los caballeros hablamos de trajes hombre, prendas que inspiraron las versiones femeninas de los trajes sastre.
Empecemos por definir la palabra traje: significaba vestido, especialmente el de las mujeres; también se utilizaba el término en el sentido de porte o aspecto propio de una persona.
La tradición del uso del traje nacería en Francia en el siglo XVIII, como moda consistente en vestir los hombres chaqueta, chaleco y pantalón de distintos tejidos y de colores muy vivos. Eran prendas de corte amplio, ya que estaban destinadas a facilitar las cosas en las labores del campo. Es decir, que su confección, en un principio estaba destinada para las labores del campo, gracias a estos diseños y con las evoluciones pertinentes, darían lugar a los trajes actuales
Trajes de hombres y su historia
El traje como hoy lo entendemos nació en 1860. Sus primeros usuarios fueron los miembros de la pequeña nobleza y la burguesía que lo usaban ocasionalmente para montar a caballo, de donde vino la costumbre de dejar un corte en la parte posterior de la chaqueta.
Como las cacerías a las que asistían vestidos con el nuevo atuendo se iniciaban al amanecer y el frío era un inconveniente, se optó por posibilitar el cierre de la chaqueta hasta el cuello, por lo que se añadió a la prenda un botón en la parte alta.
Éste se abrochaba en el ojal que todavía queda como mudo testigo de aquella práctica funcional en su día, y que suele utilizarse para colocar una flor o un botón decorativo.
Aunque al principio el traje era vestido con cierta prevención, no tardó en ser considerado prenda cómoda y práctica que empezó a llevarse también en la ciudad.
Pasados los años los sastres del siglo XIX perfeccionaron su corte en la última década de aquel siglo haciendo de él una especie de uniforme imprescindible en la vida de los negocios.
Hubo multitud de experimentos en lo que al corte del atuendo masculino se refería, sobresaliendo de entre aquellos ensayos, en 1830, el de un sastre alemán de la ciudad de Maguncia llamado Wildgans, que diseñó por primera vez un traje de una pieza para hombres, según cuenta Max von Boehn en su magnífica Historia de la moda.
El traje y sus complementos
El traje cuyo significado es «traer») es un atuendo en el que consta de chaqueta y pantalón o falda, los cuales han sido cortados de la misma tela, ya sea para mujer o varón, variando entonces muchas veces en el aspecto del traje según el género.
En el siglo XX, la palabra «traje» refiere al traje masculino que consta de chaqueta, pantalón y, a veces, chaleco, confeccionados con la misma tela; de este modo se suele llamar traje a la vestimenta masculina para actos solemnes o de «etiqueta» que constan de frac o chaqué que en tal sentido tal traje masculino es afín al traje de ceremonia o de etiqueta.
Por otra parte, el traje de ceremonia o de gala es también el uniforme de gala típico de un alto cargo o de un personaje reconocido o con cierta distinción (por ejemplo, el ya en desuso traje de embajador).
El término traje también se aplica a otros particulares atuendos o equipos que se ponen sobre algunas partes del cuerpo o cubriendo todo el cuerpo, como por ejemplo en los siguientes casos: traje español; traje de novio; traje espacial.
Elegancia a juego
Como ya sabemos, el traje de hombre es una pieza imprescindible en el armario de cada caballero, aún cuando ha evolucionado con el pasar de los años. No puede faltar un traje de sastre para una ocasión especial.
Aun cuando en sus inicios fueron confeccionados para las labores del campo, hoy en día los trajes son sinónimo de elegancia, ya que aportan importancia y prestancia a quién lo viste.
Además, dependiendo de la cantidad de accesorios que se le coloquen, es decir un pañuelo o corbata, el traje será mucho más elegante.
Trajes y ocasiones
En la actualidad los trajes de hombres son utilizados para eventos o momentos memorables. Aunque también son llevados por los altos ejecutivos de empresas de gran prestigio, en el día a día, los trajes de caballeros son utilizados en eventos de gran importancia.
A diferencia que el de la mujer, que es una vestimenta casual que es más utilizada para el día a día de la mujer ejecutiva.
Estos trajes conocidos también como trajes de sastre, son confeccionados por las manos de artesanos, así como también por grandes firmas de diseñadores de lujo, por lo que al caballero que desee hacerse de uno, deberá invertir un presupuesto considerable.
