Escribo esta carta porque me veo en la necesidad de contar algo que veo todos los días y creo que es digno de reconocimiento, si no profesional, al menos social.
Vivo en los alrededores del hospital, desde mi domicilio puedo ver casi todos los días a las chicas del COVID, como yo las llamo: dos enfermeras y una policía que desarrollan una labor encomiable, necesaria, arriesgada, digna de mención y a pesar de todo, parecen invisibles a la población.
Las chicas del COVID se dedican en estos momentos a la realización de pruebas para detectar la enfermedad esta que nos está cambiando la vida, COVID-19. Es espectacular ver cómo hacen su trabajo de forma metódica, con un protocolo claro y preciso. Las enfermeras realizan las pruebas con amabilidad y delicadeza, a pesar del traje aparatoso, y de todo el plástico que deben llevar para evitar contagios.
La policía da un trato exquisito a los ciudadanos que vienen en sus coches a realizarse la prueba, y como no se acumula gran cantidad de vehículos, está dispuesta a atender a cualquier ciudadano que le pregunte por cualquier cosa. Todo desde una sonrisa, eso es al menos lo que me imagino, porque ahora vamos todos con mascarilla.
Es curioso cómo, a pesar de no ser función de ninguna, tratan de tranquilizar a los niños, asustados y temerosos de ser “pinchados” o de qué sé yo, pues se acercan asustados y muchos acaban llorando. He visto cómo desde la ternura más agradable, entre las tres, han conseguido calmar a los niños para que puedan realizar las pruebas.
A pesar de las horas de plantón, de los bocadillos al sol, de sudar a mares por el traje puesto, del trato recibido a veces por algún ciudadano cascarrabias, las chicas del COVID siguen realizando su trabajo con amabilidad, ternura y profesionalidad digna de reconocimiento.
Desde la posibilidad que me da este medio, hago un llamamiento a la población para que no caiga en la relajación y siga poniendo de su parte para evitar contagios, y que, aunque ya no se vean tanto, sigue habiendo profesionales como la copa de un pino en primera línea jugándose la salud por un salario mensual.
Fdo: Lectora anónima de elperiodicodyecla.com
Me gusta entrar en el periódico y ver felicitaciones en lugar de quejas. Ambas son necesarias.
Indudablemente por parte de la Enfermería se está realizando una encomiable labor a pesar de lo difícil que es trabajar tantas horas con los EPIS y pasando calor. Mi reconocimiento a las 2 enfermeras que en el Hospital Virgen del Castillo continúan en primera línea, por su profesionalidad, empatía y trato humano. Sois geniales
Si, es bueno ver que existen buenos profesionales.
Un abrazo a todos, ya sea desde el sector público como del privado. Es agradable cuando un trabajo se hace bien y se le añade esa amabilidad que aporta ese plus! Y más cuando se tiene que hacer a través de capas de plástico
Totalmente de acuerdo con esta vecina del Hospital de Yecla sobre las chicas del Covid. La carta y las chicas, no se merecen el silencio de que nadie opine sobre la labor que están desarrollando estas enfermeras. De ahí que me he dicho quiero opinar yo también, como la vecina.
*Corroborar todo su escrito.
Hace unas semanas tuve que pasar por un pequeña intervención quirúrgica, esas de que terminan y te marchas a casa. A consecuencia de esta leve operación es de obligado cumplimiento el pasar la prueba del Covid. Al ir a pasar la prueba tengo que reconocer un cierto nerviosismo, ver a una persona vestida como un astronauta que se acerca a tí. Se arrima al coche, abra ud., la ventanilla, muy amablemente te dice que es un momento, que lo hará de forma cuidadosa…todo con una voz agradable de esas que dices, esta chica es buena gente. Te hacen algo de daño, el palillo lo suben hasta arriba, son escasos segundos no agradables, pero soportables, más teniendo a esas enfermeras que tratan a las personas con cariño y amabilidad.
¡¡Reconocimiento total y merecido!!
Del policia no puedo opinar, cuando llego no había nadie, pero me imagino que los servidores públicos, por regla general, son personas que conocen que su misión es ayudar, servir… y de qué manera estas enfermeras del Covid.
* Corroborar (según RAE) dar mayor fuerza a la razón, al argumento…