No todo lo que ha traído la pandemia es negativo, hay nuevas realidades que han llegado para quedarse y otras cuya llegada se ha acelerado con el virus. La telemedicina es una de esas cosas que ya existía antes, en la sanidad privada, y que ahora es una realidad tanto en ella como en la pública. Un dato muy esclarecedor es que casi el 90 por ciento, en concreto el 89 por ciento, de los usuarios que tienen un seguro privado considera muy bueno el uso de la telemedicina y los procesos de digitalización en este servicio.Lo dice el estudio titulado “Experiencia del paciente digital 2021”, presentado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS). Se trata de un trabajo que se ha realizado basado en 1.908 respuestas de pacientes crónicos y agudos, y también entre personas sanas que son usuarios de los servicios privados de medicina como un pediatra online, un médico de cabecera online o un especialista online.Hay más datos que son reveladores de cómo ha cambiado la percepción del paciente en los últimos meses en relación a su atención médica. De las personas consultadas en el estudio, un 11 por ciento se decanta por asistencia sanitaria siempre presencial. Sólo el 11 por ciento es revelador del cambio de mentalidad en esta materia. Otro dato es que el 46 por ciento prefiere tener varias alternativas a lo que es un solo modelo (ya sea presencial o telemático) y apuesta por fórmulas mixtas. Para el 43 por ciento de los encuestados, la asistencia que prefieren es la telemedicina puesto que consideran que la tecnología es la vía por la que este servicio asistencial cubrirá mejor sus necesidades.En el estudio también se identifica que entre el 60 y el 80 por ciento de los encuestados dan como buena la experiencia digitalizada y entre el 80 y el 100 por cien hablan de una experiencia “ideal”.Estos datos vienen a reforzar la idea de que la sanidad, en general y la pública en particular, requieren de una reforma en cuanto al modelo. Es cierto que se requieren más médicos de atención primaria y especialistas que podrían apoyarse en la telemedicina para mejorar las listas de espera en general.Parece propio de otro tiempo, lo de tener que acudir al médico de cabecera para que se extienda una receta de un medicamento que tomas de manera regular o que el especialista no pueda revisar a algunos pacientes vía online y agilizar su consulta.En este sentido, ya no sólo este nuevo modelo será un avance para el primer mundo, sino que también para los países más necesitados que requieren de la ayuda de los demás. La asistencia remota es una vía de progreso sanitario que seguro aliviará a millones de personas en todo el mundo que no tienen la posibilidad de tener un médico cerca que les ayude. En este sentido, ya hay ONG,s que están trabajando para mejorar los resultados sanitarios con los recursos económicos que tienen.
Lo que la pandemia ha acelerado, la telemedicina
No todo lo que ha traído la pandemia es negativo, hay nuevas realidades que han llegado para quedarse y otras cuya llegada se ha acelerado con el virus. La telemedicina es una de esas cosas que ya existía antes, en la sanidad privada, y que ahora es una realidad tanto en ella como en la pública. Un dato muy esclarecedor es que casi el 90 por ciento, en concreto el 89 por ciento, de los usuarios que tienen un seguro privado considera muy bueno el uso de la telemedicina y los procesos de digitalización en este servicio.Lo dice el estudio titulado “Experiencia del paciente digital 2021”, presentado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS). Se trata de un trabajo que se ha realizado basado en 1.908 respuestas de pacientes crónicos y agudos, y también entre personas sanas que son usuarios de los servicios privados de medicina como un pediatra online, un médico de cabecera online o un especialista online.Hay más datos que son reveladores de cómo ha cambiado la percepción del paciente en los últimos meses en relación a su atención médica. De las personas consultadas en el estudio, un 11 por ciento se decanta por asistencia sanitaria siempre presencial. Sólo el 11 por ciento es revelador del cambio de mentalidad en esta materia. Otro dato es que el 46 por ciento prefiere tener varias alternativas a lo que es un solo modelo (ya sea presencial o telemático) y apuesta por fórmulas mixtas. Para el 43 por ciento de los encuestados, la asistencia que prefieren es la telemedicina puesto que consideran que la tecnología es la vía por la que este servicio asistencial cubrirá mejor sus necesidades.En el estudio también se identifica que entre el 60 y el 80 por ciento de los encuestados dan como buena la experiencia digitalizada y entre el 80 y el 100 por cien hablan de una experiencia “ideal”.Estos datos vienen a reforzar la idea de que la sanidad, en general y la pública en particular, requieren de una reforma en cuanto al modelo. Es cierto que se requieren más médicos de atención primaria y especialistas que podrían apoyarse en la telemedicina para mejorar las listas de espera en general.Parece propio de otro tiempo, lo de tener que acudir al médico de cabecera para que se extienda una receta de un medicamento que tomas de manera regular o que el especialista no pueda revisar a algunos pacientes vía online y agilizar su consulta.En este sentido, ya no sólo este nuevo modelo será un avance para el primer mundo, sino que también para los países más necesitados que requieren de la ayuda de los demás. La asistencia remota es una vía de progreso sanitario que seguro aliviará a millones de personas en todo el mundo que no tienen la posibilidad de tener un médico cerca que les ayude. En este sentido, ya hay ONG,s que están trabajando para mejorar los resultados sanitarios con los recursos económicos que tienen.