Un bar de Yecla, del que no se ha desvelado el nombre, se ha convertido en el centro de una polémica en redes sociales después de que la popular cuenta de X ‘Soy Camarero’ publicara la denuncia de una empleada que asegura haber sufrido sanciones económicas por llegar tarde al trabajo. El incidente ha generado un amplio debate sobre los derechos laborales y las prácticas empresariales en el sector de la hostelería.
Según los mensajes compartidos por Jesús Soriano, más conocido como ‘Soy Camarero’, la trabajadora recibió un primer mensaje de su jefe notificándole un descuento de 20 euros por llegar tarde. Minutos más tarde, el empleador le avisó de un descuento adicional de 60 euros, acumulando así 100 euros de sanción en total. El jefe también le informó que debía presentarse el miércoles para firmar su baja.
20€ menos cada diez minutos que llegas tarde, 50€ por hablarle mal al jefe, sanciones inventadas después para poder despedir de forma «procedente» las condiciones: 7€/hora un día libre a la semana y turno partido.
¿Donde están esas famosas inspecciones de trabajo? pic.twitter.com/iMl6zuc7Rd— Soy Camarero (@soycamarero) September 14, 2024
Multas por llegar tarde y sanciones polémicas
El caso ha despertado la indignación de muchos usuarios, ya que además de los descuentos, el empleador habría impuesto otras sanciones que, según ‘Soy Camarero’, son inventadas para proceder a un despido. En sus publicaciones, Soriano denunció que la trabajadora recibe 7 euros por hora, con solo un día libre a la semana y jornadas partidas. Además, subrayó que «las horas extra no las paga» y que en verano las jornadas laborales alcanzan las 11 horas diarias.
“¿Dónde están esas famosas inspecciones de trabajo?”, se preguntaba ‘Soy Camarero’ en X, tras detallar las condiciones laborales que calificó de precarias. También mencionó que «no te pueden sancionar económicamente por llegar tarde», refiriéndose a la legalidad de las multas impuestas.
Un debate que divide opiniones
Aunque la mayoría de las respuestas en redes sociales criticaban duramente la actitud del empresario, algunos usuarios defendieron que la empleada tampoco estaba cumpliendo con su parte. «Lo que hace el jefe es ilegal y denunciable, pero ¿nadie va a hablar de levantarse media hora después de la hora a la que has quedado?», señalaba un usuario. Otro comentario resaltaba: «En este caso no me quedo con ninguno. Uno por explotador, y el otro que, aun explotado, a la hora de entrar a trabajar responde que se acaba de despertar».
Entre las respuestas más sarcásticas, otro usuario ironizaba sobre las sanciones: «10 minutos 20 euros. Me gusta para empezar a negociar», mientras que otros señalaban que en sectores como la hostelería los minutos extra nunca son remunerados, sugiriendo que se debería aplicar la misma lógica cuando los empleados salen tarde.
La denuncia de esta camarera ha vuelto a poner sobre la mesa las condiciones laborales en hostelería, un sector que suele ser señalado por precariedad y abuso de poder. El debate, lejos de centrarse únicamente en las prácticas del empleador, ha planteado también la cuestión de la puntualidad y las responsabilidades compartidas entre empresarios y trabajadores.
A pesar de la controversia, el caso de esta empleada ha servido para visibilizar la importancia de garantizar unas condiciones de trabajo justas y equilibradas, tanto para los empleados como para los empresarios que buscan una gestión eficiente y respetuosa.
Estaría bien saber cual es el bar….¿es posible que no sea el único que se inventa las leyes (a su favor, claro)?
Colosal contestación de Milton. El «topicazo» de Palao sobre que los empleadores (antes empresarios) son los que le dan de comer a los trabajadores, queda totalmente destrozado por la contestación de Milton.
¿Qué fue primero? El trabajo, de ahí sale el capital.
Lo de poner «multas» por retrasos en el trabajo producto del invento del empleador deja a las claras que es un poco «cacique». (Que ejerce un poder abusivo).
A la vez que totalitario. En tiempos de franco estas cosas se llevaba mucho. No se podía reclamar si te sancionaban, con decir el empleador que era comunista tenías todas las de perder.
La Inspección de Trabajo que controla López Miras, es de mirar y no tocar. Sabemos que está ahí pero que es «decoración».
¿Esto a que obedece? A que las derechas están más por el capital que por los del trabajo, cualquier política «represiva» contra los abusos no esperar a la Inspección, al menos la del Gobierno murciano.
Milei ha llegado a decir que «la justicia social es una aberración» Amigo de Feijooo, Abascal y de la Ayuso que le dio una medalla al argentino «anarco-capitalista».
«Dando gracias que la extrema derecha aún no saque a la calle sus escuadrones de camisas pardas»
Útil y violenta herramienta para reprimir a los movimientos populares, que se van a levantar contra las políticas de saqueo.
Que barbaridad !! Lo que nos cuesta ser objetivos.
Ya va siendo hora que nos dejemos de chorras y llamemos las cosas por su nombre. El idilio trabajador – empresario era, es y será un matrimonio de conveniencias, ambas partes son necesarias y se necesitan mutuamente, no hay mas que hablar, sin empresarios no hay empresas y sin trabajadores tampoco.
NADIE DA DE COMER A NADIE Y AMBOS SE DAN DE COMER MUTUAMENTE.
Respecto a la noticia, me parece vergonzosa y denunciable la postura del empresario, eso si, el trabajador, trabajadora o trabajadore ( pa Torrente) merece cuanto menos una sanción y en caso de reiteración tomar las medidas oportunas. Me parece una falta de responsabilidad, profesionalidad y respeto en toda regla.
Aun así, siempre hay que oír las dos versiones de principio a fin, sin sacar frases de contexto.
Palao, la mano que te da de comer a ti será la misma que la que te limpia el culo cuando te cagas encima. El resto de seres humanos nos apañamos solos antes de cumplir dos años.
Hay una amplia legislación laboral. Si alguien llega tarde de forma continuada se le puede sancionar , de forma verbal o por escrito, y la persona sancionada puede reclamar si lo estima.
Datos de tasas de absentismo en España de (aprox.) un 6%.
En otros sectores, llegas tarde te quitan el plus de asistencia del mes… pero todo bajo el paraguas de una legislación..
Bien es verdad que el sector de la hostelería es un sector que emplea mano de obra con horarios especiales, trabajo de fines de semana, reducciones de jornada… tiene características especiales y un convenio colectivo bastante penoso.
Otra cosa y es lo mollar; que el empresario «no puede legislar» a su conveniencia. Y se «legisla».
«Una trabajadora, no de hostelería, en su empresa echan 10 horas/día. Le dice a la empresa que le gustaría echar la jornada (legal) de 8 horas/día, por estar preparando unas oposiciones. Contestación de la empresa. Que eran las normas de la empresa (10 h) y no habían otras, que si no estaba de acuerdo ahí estaba la puerta»
No se puede multar, poner sanciones económicas… al libre criterio del empleador.
Hay unas normas, tanto para el trabajador, como para la empresa.
Me parece mal que no se cumpla con el horario estipulado, en el puesto de trabajo hay que estar a su hora, pero tan mal me parece el salir media hora más tarde o más y no ponerlas como horas extras. Personal de grandes superficies esto lo saben bien. Su horario de tarde sería salir a las 22 horas, lo mismo casi a las 23 aún están recogiendo. Sin horas añadidas.
El mundo laboral funciona así. Hay intereses distintos. Clases sociales.
La empresa no viene a coincidir con los intereses de los trabajadores, menos en una economía competitiva.
Si una empresa paga menos, más cuota de mercado, sus servicios son más baratos, más clientes, pero… hay que competir en igualdad y atendiendo a una legislación común para el sector que sea.
La Inspección de Trabajo? Uffff. Bajo el control del gobierno de López Miras, poco o nada se puede esperar. El programa económico de los gobiernos conservadores es; el «dejar hacer».
No intervenir en la economía. Dejemos que entre ellos resuelvan sus diferencias… y se resuelven, siempre, a favor del que tiene el poder? No siempre, depende el grado reivindicativo por lo que pase las clases trabajadoras.
Lo veo perfecto, hay que tener puntualidad y respetar a la mano que te da de comer