La definición que mejor se ajusta a lo que es un mecanizado industrial es aquella que se refiere a un proceso en el que se desarrollan herramientas propias de la industria que permite aportar un número de piezas que tienen un tamaño definido y una forma precisa. Cuando se habla de precisión en la industria, se hace referencia a una precisión milimétrica necesaria en servicios de metalmecánica, como en otros muchos.Para que todo nos entendamos, se trata de la típica imagen que seguro hemos visto en algún documental de televisión en el que una máquina va desgastando el material (puede ser hierro, aluminio, cobre, etc.) hasta conseguir el modo deseado que antes se ha definido. Al fin y al cabo se trata de tornos que hoy en día están manejados de manera principalmente computarizada y que mayormente se están destinados a al corte de metales que sirven para una gran variedad de industrias.El avance de la tecnología ha ido de la mano de la mejora de los procesos gracias al software que maneja las máquinas. Lejos queda la mano del hombre por completo. Operarios que antes tenían que tener una gran experiencia y precisión para realizar procesos complejos que se requerían en los tornos. Eso ha cambiado mucho y la precisión y calidad que se obtiene hoy en día es muy grande, aunque nada es imposible de mejorar. Seguro que dentro de unos años el avance de las técnicas dejará obsoletos los procesos que se utilizan hoy en día, así como los materiales con los que se ejecutan las piezas que reclaman distintas industrias.Con todo, aún hay procesos en los que se requiere de un trabajador que aporte el acabado final que garantiza la calidad del producto.
Tipología de la mecanización
En esta industria se distinguen tres tipos de procesos mediante los cuales se obtienen las piezas requeridas.En primer lugar, tenemos el proceso en el que no se extrae viruta. Como su nombre indica la trasformación de las piezas no provoca restos de viruta en el proceso. Esto se obtiene mediante el golpeo de la pieza, la transformación del plástico, mediante rodillos y alguna que otra técnica.La otra posibilidad es la obtención de piezas mediante la extracción de virutas.Se trata de la realización de la pieza por un proceso de eliminación de capas a partir de una pieza en basto. El proceso mecánico va dando forma un bloque que lo va configurando poco a poco.Y por último tenemos el mecanizado mediante la abrasión. La fricción o rozamiento de un elemento que hace de abrasador moldea a nuestra conveniencia la pieza que necesitamos. La principal ventaja de este último sistema de trabajo es que no se requiere un acabo, ya que la terminación correcta de la pieza depende principalmente de la presión con la que se trabaje en la pieza en basto con la que se arranca el trabajo.Los tres procesos que hemos enumerado se utilizan indistintamente dependiendo del trabajo a realizar. También se puede combinar en algunas ocasiones.