Aguacero con consecuencias. Cerca de 40 litros por metro cuadrado se registraron esta pasada tarde en el casco urbano de Yecla durante 45 minutos de intensa y constante lluvia.Precipitaciones que de nuevo sorprendieron a los conductores que circulaban por la carretera que une Yecla con la localidad alicantina de Villena en su primer kilómetro.El agua sigue acumulándose en ese tramo de la vía pese a las obras que se han realizado hace escasamente unos años para arreglar la obra inicial de desdoblamiento que ya presentó deficiencias que provocaban y siguen provocando inundaciones.
Los sistemas de evacuación de agua de nuevo no dieron abasto y los ocupantes de cuatro vehículos se quedaron atrapados en medio de la laguna que se formó. Los conductores tuvieron que esperar a la llegada de los bomberos que tuvieron que rescatar, entre otros, a dos bebés del interior de los turismos. No hubo que lamentar daños personales pero sí que los conductores mostraron su enfado por la situación que tuvieron que vivir e incluso hubo algún momento de tensión con los servicios de emergencias.
Media hora después, los que aparecieron por la zona fueron las grúas para retirar los vehículos que quedaron inutilizables.
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Desde el primer momento de la tormenta, la jefatura de la Policía Local de Yecla vio como se colapsaba su teléfono con multitud de llamadas de vecinos que alertaban de la inundación de las calles con alcantarillas que saltaban ante el volumen de agua de lluvia que se registró desde las 5 y media de la tarde cuando comenzaron las precipitaciones.
Hubo momentos en los que las conexiones de salida por carretera desde Yecla a municipios como Jumilla y Pinoso también estuvieron impracticables para el tránsito de vehículos.
Además del tráfico, el 112 recibió varias llamadas en la que los vecinos pidieron ayuda ante inundaciones en bajos y otros porque no podían salir de sus casas de campo. Es el caso de unos vecinos cuyo chalet se encontraba en las proximidades del pozo de Santiago donde el agua había anegado completamente la salida de la vivienda. Los bomberos se personaron en el lugar y tranquilizaron a los ancianos que permanecieron en su casa.
Las calles de la parte alta del municipio se convirtieron en ríos de agua. Las primeras informaciones apuntan a daños en el asfalto en algunas vías, y en avenidas como la de San Pablo el agua había arrastró al asfalto gran cantidad de tierra.
También el albergue de animales que gestiona Spandy se encuentra completamente anegado, según han explicado en sus redes sociales la protectora.
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Eso se hizo mal al no elevar la carretera y está mal para toda la vida