El bienestar de los animales está por encima de todo para Toni Campos, responsable de la Granja Móvil que estuvo presente en el mercado de las fiestas de San Isidro. Las ocas, gallinas, cabras y un poni estuvieron muy bien acompañados todo el tiempo por sus cuidadores y por todas las personas que se acercaron a conocerles o darles de comer. Disfrutaron pequeños y grandes.
Lo primero que pensé, al ver a todos los animales juntos y con tantas visitas, fue que se acabarían estresando y lo pasarían muy mal. Pero resultó todo lo contrario. Me llevé una agradable sorpresa al conocer al creador de este proyecto y hablar con él: “Los animales me aportan la vida, no sabría vivir sin ellos, de la misma manera que no quisiera vivir sin mis hijos. Son todo para mí y me hacen muy feliz”.
Toni Campos comenzó en el 2007 esta labor educativa con el objetivo de “acercar los animales a la sociedad, especialmente a los niños, para que los conozcan y aprendan a respetar a todos por igual, ya sea un perro o una gallina, porque todos merecen el mismo cariño”.
Para los niños un animal es un juguete que se mueve, por eso es tan importante la educación en este sentido: “Algunos piensan que el pollo viene del supermercado, y desconocen su verdadero origen. Otros te dicen que quieren ordeñar la vaca y es una cabra. La ignorancia en los niños, cuando todavía no han tenido contacto con los animales, es bonita. Lo único es que tendría que haber en la calle mucha gente como yo, y en lugar de prohibir o limitar nuestra actividad, impulsarla y desarrollarla, para que las futuras generaciones, los niños de hoy, se relacionen con estos seres tan amorosos. Además, tengo más que comprobado que su inteligencia es superior a la de cualquier persona. Creo que el único animal irracional que existe es el ser humano”, afirma Toni.
Aunque las ocas compartían un mismo espacio con las gallinas y las cabras, se percibían tranquilas y receptivas la mayor parte del tiempo. Para que esto sea posible, Toni realiza un gran trabajo cada día en el campo, conviviendo con “sus niños”. Allí se mueven libremente y son el centro de atención: les da de comer, juega con ellos y les habla de forma muy natural. En los eventos, sucede lo mismo.
Los animales confían plenamente en su dueño porque saben que no los va a matar ni los va a vender; en ningún caso pondría en riesgo sus vidas. Toni está para servirles y, ante todo, tratarles con respeto: “Si la prioridad es el animal, ya no hay negocio. Sólo si los explotas y maltratas es rentable. Por ejemplo, si no te marcas un horario y mientras hay gente están disponibles, es cuando se gana dinero, a costa de su bienestar. Nosotros pasamos muchas horas con ellos y hemos aprendido la forma de comunicarse que tiene cada uno de ellos. Durante los eventos vamos a su ritmo, paramos y les atendemos en cuanto nos lo piden.
San Isidro Labrador es patrón de los campesinos, de los agricultores y también reconocido por su amor y respeto hacia los animales. Ha sido todo un acierto la presencia de la Granja Móvil en el mercado de las fiestas, porque su filosofía de vida está en perfecta sintonía con los valores del santo.