El aprendizaje desde casa se acentuara cada vez más para los alumnos de todo el mundo ya que es una gran opción al no tener que desplazarse a un centro escolar. No todos los niños están hechos para el aprendizaje desde casa al perderse el carácter social de compartir los estudios con otras personas de la misma edad. Esto lleva a que el aprendizaje desde casa esté mejor pensado para personas con una mayor edad que ya hayan finalizado sus estudios obligatorios.
Los centros universitarios tienen una gran oportunidad a la hora de atraer nuevo talento a sus aulas al poder ofrecer un modelo de estudio híbrido a los mejores estudiantes de todo el mundo. Este modelo consistiría en intercalar clases presenciales con aprendizaje desde casa ya que se ha demostrado que los estudiantes pueden tener un gran rendimiento aprendiendo a distancia.
Hay un gran número de plataformas que se verán beneficiadas con el crecimiento del aprendizaje desde casa como es el caso de los servicios de transcripción. Este tipo de servicios da la posibilidad a los estudiantes de transcribir a texto una clase entera dada por un profesor, algo ideal para poder estudiarla de manera eficiente sin necesidad de invertir demasiado tiempo en su transcripción. Además, muchas de estas plataformas permiten traducir y transcribir los textos a varios idiomas, algo ideal para compartir conocimientos entre distintos territorios.
Dificultades para profesores a la hora de enseñar a distancia
Cuando los profesores y los alumnos están dispersos en espacios vitales individuales, cada uno con sus propias características y peculiaridades, el entorno de aprendizaje está plagado de variabilidad que el profesor nunca puede comprender del todo, y mucho menos abordar. La investigación etnográfica sobre la domesticación de la tecnología ofrece una visión útil sobre cómo los factores particulares varían a través de diversos entornos domésticos para facilitar o impedir el aprendizaje en el hogar.
Aunque estos factores están relacionados con aspectos aparentemente mundanos y prosaicos del hogar, tienen un gran peso en la experiencia de aprendizaje de los alumnos. Son los siguientes: espacio, dispositivos, acceso y habilidades. Esto quiere decir que los padres también deben prestarse a que los jóvenes puedan estudiar desde el hogar ya que deben tener un entorno seguro para hacerlo.
Encontrar el espacio ideal de aprendizaje
Mientras que los niños solían ir a sus respectivos colegios, ahora aprenden desde sus dormitorios o salones compartidos, con varias clases simultáneas. Los hijos pueden empezar a mandarse a callar constantemente para escuchar a sus profesores, algo que puede resultar agotador si tiene lugar durante todos los días.
Encontrar espacio suficiente para que todos los niños se acomoden cómodamente con sus dispositivos y materiales de referencia impresos, y para que completen las tareas mientras escuchan las instrucciones online, será otra hazaña logística que requerirá fortaleza e ingenio.
La adaptación de todo el núcleo familiar es clave ya que el teletrabajo y el aprendizaje desde casa parecen haber llegado para quedarse. Es cuestión de tiempo que cada vez se vea más esta tendencia a la hora de estudiar en escuelas o en puestos de trabajo donde se quiera evitar la pérdida de tiempo que supone ir a una oficina.
