En la Región de Murcia uno de los sectores que más ha acusado la crisis económica y sobre la que más efectos negativos ha tenido ha sido, sin duda alguna, el sector del mueble y la madera, al encontrarse estrechamente vinculado al de la construcción.
Todos los males que confluyen en una crisis económica se han concentrado en este sector manufacturero de la comunidad murciana, cuyo núcleo principal se concentra en el municipio de Yecla, que ha sido uno de los más castigados, alcanzando unos índices de paro inimaginables. Yecla es la octava localidad de España donde peores consecuencias ha traído la crisis, según recoge un estudio realizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en donde apenas había 800 parados en 2006 y se rozaron los 5.000 en 2103. A fecha del mes de marzo el número de trabajadores desempleados registrados en las oficinas del Sefcarm se sitúa en 4.166.
El bucle económico de la crisis económica ha obligado a las empresas del mueble y la madera las ha posicionarse en una época difícil en lo que a morosidad se refiere. Los bajos índices de consumo de estos últimos años en el mercado nacional, unidos a la falta de financiación por parte de las entidades bancarias y al descenso de facturación del sector de la construcción, han condicionado de manera evidente el retraso y en muchos casos el impago del cobro de las facturas de clientes. Esta situación ha supuesto un estrangulamiento financiero de las empresas del sector, que si bien, en la comunidad murciana , ha registrado unos ratios mejores que a nivel nacional, sí ha hecho que muchas empresas hayan tenido que cerrar su puertas.
La alta morosidad en este sector ha sido evidente. Ha sido un sector empresarial muy confiado en su clientela, pues no había motivos para lo contrario hasta que surgen las dificultades, y en los nuevos compradores que llegaban. En los primeros años de la crisis económica había que vender, ajustando los precios de producción, pero muchas veces sin constatar el grado de la fiabilidad financiera de los nuevos compradores, lo que ocasionó consecuencias fatales para la economía de esta industria, que se vio en muchos casos estrangulada por los impagos.
Las dificultades en el pago, también el cierre de un gran número de empresas localizadas en Yecla y otras muchas que se encuentran en la actualidad en concurso de acreedores, ha tenido una repercusión negativa para las arcas del Ayuntamiento de Yecla, que en estos años de crisis económica ha visto reducidos sus ingresos en los pagos de los impuestos y tasas municipales procedentes del sector industrial, entre ellos el del IBI.
Este sector llegó a registrar unos períodos medios de cobro, según datos de CEPYME, de 111,7 días en el año 2008, pasando por los 85,9 en el año 2011 y a los 79,6 en el último trimestre del año 2014. Lógicamente, el encadenado de las consecuencias de una crisis económica, por el retraso y la falta de cobros también pasa por los retraso en los pagos a proveedores. Los períodos medios de pagos en este sector se situaron en el año 2008 en 111,8 días, en el año 2011 en 83 días y en el último trimestre del 2014 , en 80,9 días.
AREMA pide un plan renove para reducir la morosidad
La secretaria general de la Asociación Regional de Empresarios del Mueble (AREMA) Patricia Cuadrillero indica que «más del 20% de las empresas del sector del mueble y la madera que han desaparecido, se han visto forzadas a ello por el incremento del índice de morosidad.
Es importante entender, añade, que el hecho de que las pequeñas y medianas empresas (PYMES) que conforman el sector de la madera y el mueble de la Región, en un alto porcentaje, son empresas consolidadas y han podido superar de forma más efectiva la situación de crisis, por su apuesta por la exportación y en muchos casos, por los importantes reajustes de costes económicos en las que se han visto inmersas». Cuadrillero es optimista al señalar que «a pesar de ser unos de los sectores más castigados, esta industria mantiene una estructura que le permite incrementar sus ratios de producción rápidamente y por tanto incrementar el número de trabajadores en sus factorías, en el momento en el que los índices de consumo nacionales empiecen a mejorar. También ayuda a ello la presencia consolidada de las fabricantes de mobiliario murcianos en los mercados internacionales».
Desde Arema, junto con la Federación Nacional de Empresarios del Hábitat (FEDERHÁBITAT) se reivindica de la administración pública un «plan renove» para el sector mueble, como impulso al incremento de la compra de mobiliario, ya que si bien la recuperación del consumo, basada en la capacidad de renta disponible y en los índices de confianza del consumidor, se ha incrementado, no es menos cierto que la compra de muebles aún está por debajo de la media», señala Patricia Cuadrillero. Según los datos del 2014 la venta de muebles aumentó un 5,3 %, mientras que la compra de grandes electrodomésticos el incremento fue de un 7,5%.
Los empresarios del mueble están convencidos que un apoyo institucional a la comercialización del mobiliario, tanto en el mercado nacional como para el exterior, supondría un descenso inmediato de los índices de morosidad, que se traduciría en una una reactivación de las empresas, y por lo tanto al ser un sector de mano de obra intensiva , en un incremento de las contrataciones.
Datos económicos sector mueble
Antes de iniciarse la crisis económica, este sector industrial en la Región de Murcia tenía censadas más de 1.500 empresas relacionadas con la industria del mueble y la madera. Actualmente, las empresas registradas son 1.050, por lo que la crisis se ha llevado por delante a cerca de medio millar de empresas, lo que supone la destrucción de más de un 30% de su tejido industrial y miles de puestos de trabajo directos . Este sector, manufacturero por excelencia, cuenta en la actualidad con 6.700 empleos. La mayoría de estas empresas tienen menos de 10 trabajadores y son 737 las que se dedican exclusivamente a la fabricación de muebles, especialmente tapizado. Este sector alcanzó una facturación económica en el año 2014 de 205 millones de euros, lo que supone 149 millones menos de euros que en el año anterior.
La internacionalización de las empresas de este sector se inició en la década de los años 90. Este salto al exterior se debió al descenso del consumo interno en aquella época, lo que llevó a los empresarios a buscar nuevos mercados.
El mueble murciano está presente en todo el Las exportaciones de mueble de la Región de Murcia en el año 2014 alcanzaron los 66,4 millones de euros, lo que supuso un incremento del 32,5% con respecto al ejercicio anterior.
El peso económico de la fabricación de muebles en la industria regional supone el 3,5% del VAB industrial.
