¿Debemos enseñar a los niños cómo es el mundo de las financias dedicando recursos a la educación financiera?. Vivimos en un sistema capitalista, pero, ¿sabemos cuáles son los beneficios y los riesgos del capitalismo? Después del colapso financiero mundial que se registró en el año 2008, se enfatizó la importancia de la educación financiera como una estrategia para prevenir comportamientos económicos no deseables y, al mismo tiempo, como un mecanismo inclusivo y de oportunidad para la participación económica de todos los ciudadanos.
Esta labor requiere la colaboración de gobiernos, autoridades financieras, entidades bancarias, numerosas organizaciones sociales, y también la formación personal con plataformas como Immediate NeuPro que desarrollan una variedad de actividades y programas de educación financiera.
Desde hace décadas se ha explicado desde diferentes ámbitos la necesidad de una sólida formación financiera. En el prefacio de la versión en español del manual de Economía de Paul Samuelson, se explicaba que, aunque el sistema educativo enseña propiedades como las de los asteroides, unos objetos que la mayoría nunca encontrará en su vida adulta, se presta poca atención a conceptos económicos esenciales, como el funcionamiento de las entidades financieras, con las que tendrán que lidiar y convivir a lo largo de su vida.
La dificultad de aprender economía
A pesar del creciente impacto de las noticias y decisiones económicas en nuestras vidas, la economía sigue siendo un tema marginal en la educación obligatoria, dejando a la mayoría de los alumnos sin conocimientos financieros básicos. Con conceptos como la prima de riesgo o la inflación cada vez más presentes en nuestra vida cotidiana, y la aparición de nuevas formas de inversión, como los criptoactivos, la formación financiera se vuelve aún más crucial para navegar por un terreno cada vez más complejo.
Una sólida educación financiera también protege a la sociedad de las promesas vacías de los partidos políticos extremistas y sus propuestas económicas arriesgadas, que a menudo conducen al desastre. Tales propuestas, como el desmantelamiento del banco central o la salida del euro, suelen atraer a un electorado con escaso conocimiento económico.
El populismo, tanto de izquierdas como de derechas, se suele nutrir de la ignorancia para manejar a las masas hacía donde quieren.
Teconología
La digitalización ha ampliado la competencia en el sector financiero, con la llegada de empresas fintech y gigantes tecnológicos, ofreciendo una amplia gama de oportunidades de inversión para todos los ciudadanos. Sin embargo, mientras que las clases más privilegiadas aún pueden contar con asesoramiento financiero personalizado, otros deben confiar en sus propios conocimientos para gestionar sus inversiones.
Los preocupantes resultados del reciente Informe PISA para España destacan la necesidad de mejorar la educación económica. Además, la última Encuesta de Competencias Financieras del Banco de España revela que solo un pequeño porcentaje de la población tiene conocimientos financieros básicos, mientras que un estudio de la Comisión Europea muestra que nuestros conocimientos financieros están por debajo de la media europea, y que nos sentimos menos cómodos utilizando servicios financieros digitales en comparación con otros países europeos.
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