La procesión Penitencial del Rosario volvió a recorrer el casco antiguo de Yecla, con sus calles estrechas, y su ambiente de recogimiento.
Desde 1980 se desarrolla está procesión que atraviesa el medieval de la ciuda. El sonido es otro de los elementos clave de esta procesión que transcurre acompañada de los cánticos de polifonía sacra, el sonido de las cadenas arrastradas por los capuchinos que participan con el rostro tapado y el constante rezo del «Ave María» del Santo Rosario.
En esta procesión se entremezclan el silencio, la reflexión y la penitencia.
Desde la Iglesia del niño partieron en plena noche los pasos del Santísimo Cristo de la Salud y María Santísima Dolorosa. Las autoridades locales estaban acompañadas del Consejero de Educación, Víctor Marín.
Los vecinos de Yecla acompañaron a los penitentes en su lento caminar, con la cruz y las cadenas arrastrando su caminar entre el incienso que impregnaba el ambiente de una fría noche del mes de marzo en Yecla.
Más allá de la media noche, el lento transcurrir de los penitentes y las imágenes desembocaban de nuevo en la Iglesia del Niño.
Esta procesión está organizada por la Pontificia, Real, Hospitalaria e Ilustre Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo de la Salud, María Santísima Dolorosa y San Juan de Jerusalén y Muy Antigua Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores y Soledad.
Galería de fotografias, Juanjo Martínez
