Cuando todo apuntaba a un acuerdo, diferencias en cuándo aplicar la subida salarial rompen el entendimiento. La última reunión mantenida entre sindicatos (USO y CC.OO) y la Asociación Regional del Mueble y la Madera (AREMA), el pasado 2 de marzo terminó, con un acercamiento hasta el punto que una propuesta de la patronal fue llevada a una asamblea de trabajadores para su debate, “aunque está lejos de los objetivos y pretensiones que teníamos la parte social”. Pero el acuerdo se ha roto en el último paso.La propuesta de la patronal planteó una subida salarial del 3,7% al salario base y un 0,3% al plus de asistencia. La asamblea, que fue mucho más mayoritaria que la anterior, dio visto bueno para negociar dicha subida. “Aun estando muy dividida, asumiendo que no era la subida esperada ni querida, pero por el bien de la paz social, por desencallar las negociaciones y para no seguir generando atrasos se aceptaba”, explican los sindicatos.La sorpresa ha llegado cuando, una vez revisadas y corregidas las tablas y a falta de la firma del acuerdo, AREMA ha comunicado que la subida no iba a ser aplicada. El matiz es de fechas. Los sindicatos quieren que la subida se aplique desde el 1 de enero de este año, y la patronal desde el 1 de marzo.Para los sindicatos, el convenio firmado en 2021 es claro al respecto y determina que los salarios que se negocian para 2023 entrarían en vigor a partir del 1 de enero de este año. Los sindicatos también explican que hay empresas que por recomendación de la propia AREMA ya aplican a cuenta desde el 1 de enero una subida del 3%. Por lo tanto, “si no hay atrasos, dichas empresas que hacen caso de las recomendaciones de AREMA se verían perjudicadas frente a las empresas que van por libre y que sería competencia desleal hacia las empresas que sí cumplen, explican.
Aplicación según la Ley
Pra USO y Comisiones Obreras, la patronal ha hecho caso omiso del argumento de que la propia Ley del convenio. La normativa indica que la subida se aplicará desde el 1 de enero. Y también “les ha dado igual el perjuicio que se ocasiones a las empresas que sí han cumplido sus propias recomendaciones de subir el 3% desde enero”. Desde la parte social comentan que era un esfuerzo haber bajado las pretensiones al 4% viendo cómo está el coste de la vida. ”Hemos sido responsables de aceptar por el bien del sector. Pero esta medida de no pagar atrasos, que solo afecta a las empresas que no cumplen las recomendaciones de la propia AREMA, entendemos que es la gota que ha colmado el vaso, que crearía un precedente peligroso ya que como han hecho este año, que desde noviembre hasta marzo no se han movido de su postura, puede ser una forma de ahorrarse parte de los salarios de enero y febrero las empresas que no han aplicado subida a cuenta”.Con todo, la última reunión que iba a ser la definitiva para la firma de la subida de las tablas salariales ha terminado sin acuerdo. Por su parte, hoy está prevista una reunión en el seno de AREMA. Se pretende analizar la situación que se plantea desde este momento sobre la subida salarial del sector del mueble en la Región.
Pero vamos a ver si el convenio se tenía que haber subido todos los años el 5 % desde hace 20 años.
Y las categorías cada 5 años subirlas. Por ley .
El convenio de la madera ni es convenio ni es nada hay mejores convenios en China que en Yecla.
Y lo que hace falta son inspecciones todos los días.
Totalmente de acuerdo con Copernicus. No todo vale a costa de los trabajadores. El Convenio debe de firmarse con fecha 01/01 y no regalar esa parte del dinero.
El ahorro siempre a costa de los trabajadores
Cuesta entender esta situación. Si lo «gordo» está en la subida salarial (4%) y cada parte se he dejado sus «pelos en la gatera» (superar una dificultad con muchos apuros) y hay acuerdo, la vigencia del convenio no debería ser obstáculo para cerrar el convenio, más cuándo se supone que muchas empresas asociadas a AREMA habrán aplicado su recomendación de pago a cuenta del 3%.
Los atrasos serían un 1%, por el mes de enero, lo mismo en febrero a las empresas que dieron a cuenta. El «chocolate del loro» El que quería ahorrar, prescindió de una onza de chocolate que le daba al loro.
Es por esto que se entiende más bien poco esta situación. Sin tener la bola mágica, espero que en unos días el Convenio esté firmado con su vigencia desde el 1 de enero como se viene haciendo toda la vida. La cordura y el sentido común terminan imponiéndose.