El Yeclano consiguió tres puntos muy trabajados frente al Pulpileño, pues casi cuando sonaba la campana un gol de Tonete daba los tres puntos que son un alivio después de una semana complicada.
La primera parte fue mala de los de García Sanjuán que recibían a un equipo guerrero y dispuesto a sacar tajada del río revuelto del Yeclano.
Mada adelantaba a los almerienses a los 20 minutos de la primera mitad de un disparo colocado que no alcanzó a detener el portero Pepelu.
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Los jugadores locales vivieron entonces sus peores momentos por los nervios y el fantasma de la derrota de la semana pasada frente al Caravaca y la borrasca que provocó.
El Pulpileño fue haciéndose dueño del balón y pudo haber sido merecedor ese momento de algo más que un 0-1. Sin embargo, el Yeclano consiguió un gol que le metió de nuevo en el partido. Tonete marcó el empate en el 35 con un gol que calmaba los ánimos y permitía llegar al descanso con otra perspectiva.
En la segunda mitad, los locales salieron a ganar el partido. Fruto de ese impulso, varias oportunidades se fueron acumulando para despegar en el marcador. Pero unas veces la mala puntería y otras la mala fortuna, fueron suficiente para llegar al final con el empae.
Tuvo que ser en los últimos instantes, yendo a la desesperada, cuando Crivi centró desde la izquierda para que de nuevo Tonete, ahora de cabeza, la pusiera fuera de alcance del portero del Pulpileño.
La alegría de los tres puntos bien mereció ese final de infarto que sitúa al Yeclano en la tercera posición de la tabla tras el pinchazo del Mar Menor.
