Los locales merecieron ganar. Tal cual. Pero este Yeclano Deportivo tiene gol y si perdonas tanto como ha perdonado el Villarrobledo, lo puedes acabar pagando. Y así ocurrió. Miguel Serna se volvió a vestir de héroe y una y otra vez puso freno a las innumerables intentonas de los manchegos. Para más inri, cuando parecía que los locales se iban a llevar la victoria por la mínima, apareció Tonete para dar un zarpazo demoledor y colocar las tablas en el marcador.
El partido comenzó como han comenzado todos los partidos que el Yeclano Deportivo ha jugado fuera de casa: con el rival acosando el área de Serna. En los primeros cinco minutos, el meta salvó al Yeclano en varias ocasiones… y de hecho a punto estuvo de lesionarse en una de esas jugadas. Por suerte, no fue así y el portero pudo seguir.
Los primeros quince minutos fueron de dominio constante de los manchegos, sin embargo, cuando parecía que los de Sandroni se reponían, Agus Alonso adelantó al Villarrobledo tras un muy buen pase de Dani Lozano. Corría el minuto 19 de partido.
De ahí, al final de la primera parte, pocas ocasiones de gol. Tuvieron Perona y Agus Alonso el segundo de los locales y Mario Sánchez el empate de los de Yecla, pero el balón no quiso entrar en ninguna de las porterías.
Un correcalles que pudo acabar muy mal
En la segunda mitad, de nuevo Serna fue el gran protagonista de los yeclanos. Lo atajó todo el meta murciano, inconmensurable una jornada más. Mientras tanto, el Yeclano seguía dormido, viendo cómo los locales hilvanaban jugada tras jugada, intentando hacer el segundo y sentenciar el choque.
Sufrió, y mucho, el equipo dirigido por Sandroni durante toda la segunda parte, dormido, impasible, en el que, probablemente, haya sido su peor partido de liga. Pero cuando parecía que el segundo del Villarrobledo estaba a la vuelta de la esquina, llegó Tonete, que sustituyó minutos antes a Luis Castillo, para hacer el empate en el 76.
El gol llegó en el mejor momento posible y justo después de que Mario Sánchez salvara el 2-0 bajo palos. En la contra, apareció Tonete y no falló.
De ahí al final del choque, Miguel Serna se vistió nuevamente de héroe. Paradones a bocajarro, en el uno contra uno, con estiradas imposibles… El Villarrobledo lo intentó de todas las formas y colores, pero el portero del Yeclano no quería dejar escapar el punto.
Y finalmente, así fue. Los de Sandroni certificaron el empate sin volver a llegar a puerta en todo lo que restaba de partido. Es más, sin casi sacar el balón de su campo. Pero ahí estaba el de siempre. Miguel Serna. Otro punto que el meta permite sumar al equipo. Lo mejor de todo, los más de 100 aficionados de Yecla que no quisieron perderse el partido en tierras manchegas. La próxima semana, derbi regional frente al UCAM en casa. Seguimos.