¿Qué sucederá el próximo año en el mercado bursátil? Esa es la pregunta que se hacen los inversores ante varios interrogantes que preocupan y ocupan. Uno de los factores que hay que tener en cuenta son las elecciones norteamericanas el próximo otoño. Con una situación de máximos en el Dow Jones, los analistas consideran que la política pueda afectar de forma negativa ya que el presidente de los Estados Unidos y próximo candidato de los republicanos, Donald Trump, puede recrudecer su discurso y sus acciones de protección ante mercados como el chino. Esa situación ya ha costado este año grandes pérdidas en los mercados bursátiles que son analizados por expertos como busquesubroker de forma regular.Además, los inversionistas están a la espera de saber si las nubes económicas que apuntan algunos índices de referencia se transforman en una simple tormenta de verano (breve pero intensa) o estamos ante lo que puede ser una tormenta de grandes dimensiones que cause una recesión internacional. En este sentido, las posturas de los expertos son dispares. Desde los que anticipan una crisis como la originada en la pasada década por el caso de Lehman Brothers, hasta los que son más optimistas y hablan de una simple ralentización de la economía.En este sentido, el motor de la economía europea, Alemania, ha dado síntomas de debilidad en 2019 evitando por poco la recesión a tenor de los índices de actividad económica interna.Pese a todo, Europa tiene otro gran problema que se llama Brexit. Las próximas elecciones en Reino Unido determinarán una nueva configuración del parlamento británico donde el partido conversador puede que no tenga los suficientes apoyos para sacar adelante una salida de la Unión Europea tal y como desea Boris Johnson. En este sentido, parece que aumenta el número de voces que ven al país anglosajón abocado a un nuevo y definitivo referéndum en el que se dé voz a los ciudadanos a la hora de tomar una decisión que puede ser dramática para la economía inglesa y muy complicada para la de Europa.Un cuarto elemento ha ido cogiendo peso en los últimos meses en la evolución de la economía global. Se trata de la inestabilidad del sur del continente americano. Los disturbios que se están viviendo en países como Colombia, Chile o Bolivia, más la destrucción interna de Venezuela, están en el punto de mira de los expertos ya que se trata de zonas del planeta donde hay materias primas muy importantes para la economía occidental.Con todo, también hay elementos positivos en el contexto sociopolítico como el acercamiento de posturas entre China y los Estados Unidos en materia de aranceles en el intercambio comercial entre los dos gigantes de la economía mundial.
También parece que se va desinflando la tensión en medio oriente entre Irán y occidente, pero el régimen iraní está dispuesto a seguir plantando cara a Trump.Con todo, las apuestas hablan de un 2020 complicado en los primeros seis meses y dependerá de estos factores y otros que irán surgiendo que tengamos un año de crisis o de transición hacia el progreso de la economía del planeta.
