La televisión, con su llegada, revolucionó para siempre el mundo del entretenimiento. Desde la invención del aparato, allá por los años 20, su influencia y su peso no ha dejado de crecer. A lo largo de las décadas de los 50 y 60, cuando su uso se generalizó (gracias, entre otras cosas, al impulso comercial estadounidense, donde esta caja luminosa y su contenido pasó a formar parte integral de la vida de los norteamericanos y un factor predominante en la cultura popular), la televisión pasó a convertirse en todo un fenómeno de masas.
La televisión de ayer y de hoy
La televisión, por supuesto, ha cambiado (y sigue cambiando a un ritmo frenético) a lo largo de los años. Con la llegada de la tecnología y de internet, las formas de entretenimiento y formatos televisivos han ido cambiando. La irrupción de fenómenos como las plataformas por streaming, las redes sociales o las apuestas online, ha ampliado y diversificado la oferta de entretenimiento de manera más que considerable. Sin embargo, muchas de las emisiones televisivas con un largo historial de éxito en el pasado siguen siendo muy populares en la actualidad. Citas como los mundiales de fútbol, las olimpiadas, u otras competiciones de distintas disciplinas populares según la situación geográfica, cuentan, evento tras evento, con un seguimiento enorme. Otros contenidos, como pueden ser las series (que a finales de los ochenta y principios de los noventa comenzaron a repuntar) han sabido adaptarse a los nuevos formatos hasta convertirse en una de las alternativas predominantes del mercado del entretenimiento. Por otro lado, los conciertos y las grandes citas musicales, que históricamente han ocupado un lugar importante dentro de las audiencias televisivas, han sucumbido a las nuevas formas de consumir este tipo de contenido (Youtube, Spotify, etc.) y su peso en la actualidad es menor. Por último, los reality shows parecen presentarse como el “último bastión” de las emisoras de televisión tradicionales, manteniendo cuotas de audiencia elevadas en esos medios, aunque sin acercarse a las cifras de espectadores de las que podían presumir cuando la oferta era menos amplia.
Unos cuantos momentos para la historia de la televisión
Hay momentos en la historia que marcan una época. Un puñado de ellos han sido recogidos por la televisión y acercados a los hogares de millones de personas. No sorprende que acontecimientos como el aterrizaje en la luna del Apolo 11, el asesinato de Kennedy o el ataque a las Torres Gemelas cuenten con audiencias tan destacadas. Los juegos olímpicos, los mundiales de fútbol y las Eurocopas son otras de las citas más populares. Actualmente, eventos como la Super Bowl o la Champions League cuentan, también, con audiencias muy elevadas. En el ámbito del deporte, cabe destacar particularmente el combate de Boxeo que enfrentó a Ali y a Foreman (allá por los años 70 y 80), y que atrajo una cuota de pantalla impresionante. En el ámbito musical, citas como el Live Aid de Londres o el concierto de The Wall frente al Muro de Berlín se llevan la palma. Los funerales también pueden ser otros de los acontecimientos destacados en lo que a audiencias se refiere, las ceremonias fúnebres de Lady Di y de Michael Jackson son buena prueba de ello. Por último, no podemos olvidarnos de algunas series clásicas de la televisión como Los Vigilantes de la Playa, un auténtico fenómeno a finales de los 90.
¿Y en España?
Fútbol, series y reality shows, así podemos resumir lo que más se ha visto en nuestro país. Como cabía esperar, las finales del mundial de Sudáfrica y de la Eurocopa de 2012, donde España salió campeona, han sido unas de las citas más vistas. Programas como el Un, Dos, Tres, o realities como Gran Hermano u Operación Triunfo (sobre todo en sus primera ediciones), consiguieron cotas de audiencia récord. Además, series como Médico de familia, Hostal Royal Manzanares, Farmacia de Guardia o, más adelante, Los Serrano, conquistaron al público español de aquellos tiempos en los que la televisión y sus programas eran el centro indiscutible de los salones de la mayoría de los hogares de nuestro país.