En una destacada labor de conservación preventiva, Penélope Santa Puche y su equipo de «brigadistas» han restaurado la estatua de Cayetano de Mergelina en Yecla, devolviéndole su mejor lustre. La escultura broncínea, que esculpió Emilio Pascual hace más de una década, ahora luce en la ubicación para la que se ideó, frente a su casa y frente al Museo Arqueológico que lleva el nombre de este ilustre yeclano de adopción.
La dedicación y buen hacer de José Ángel, Abel, Alejandra y el magnífico fotógrafo del grupo, Nacho, han sido vitales para tan espléndida restauración. Los brigadistas, formados bajo la tutela de Peni en el Museo, han demostrado que están perfectamente preparados para preservar el patrimonio de la ciudad, tanto en los museos como en las plazas. 
Este logro ha inspirado la idea de mantener la labor de conservación en el tiempo y extenderla a otros monumentos en la ciudad, como el monumento al «tiraor» en la Plaza Mayor, el Monumento al Mueble en la rotonda de la Feria del Mueble, el monumento al obrero del mueble en el «cespín», el monumento a Azorín en el parque de la Constitución, el monumento al médico forense Mariano Yago y el monumento a la Concordia en la plaza homónima.
La propuesta de convertir Yecla en un espacio museístico al aire libre gana fuerza. Se espera que, en un futuro próximo, la ciudad se convierta incluso en un referente en este sentido, tal y como reconocía en sus redes el director de la Casa de Cultura y arqueólogo municipal, Liborio Ruiz.
Quién fue Cayetano de Mergelnia
Cayetano de Mergelina y Luna (1890-1962) fue un destacado arqueólogo, catedrático y político español. Aunque nació en Sanlúcar de Barrameda, pronto vino a Yecla, donde estudió Bachillerato. Posteriormente, estudió Historia en Madrid bajo la influencia de grandes figuras como Manuel Gómez-Moreno y Antonio Vives. Más tarde, se convirtió en catedrático de Arqueología, Numismática y Epigrafía en la Universidad de Valladolid.
Durante su carrera, organizó cruceros culturales y participó en excavaciones arqueológicas en diversas regiones de España. Durante la Guerra Civil (1937-1939), presidió el Museo Arqueológico Nacional. Tras la guerra, ejerció como rector de la Universidad de Valladolid hasta 1951 y posteriormente ganó la cátedra de Historia del Arte en Murcia, donde creó el Seminario de Arqueología.
Entre sus obras más destacadas se encuentran investigaciones sobre el monte Arabí, la necrópolis tartesia de Antequera, y las excavaciones de Bello en Cádiz, entre otras.
Su legado perdura en la dedicación a la arqueología y en la formación de nuevos arqueólogos a través de su enseñanza en diversas universidades. El profesor Cayetano de Mergelina murió en su casa de Yecla el 14 de abril de 1962, justo la que hay frente a la estatua.
