Nunca el arte ayudó tanto a las personas con diversidad funcional. Desde hace un par de años está en marcha el proyecto denominado “Brigada del Arte” en el Museo Arqueológico Municipal.
Se trata de alumnos que padecen, entre otras discapacidades, síndrome de Asperger y espectro autista, síndrome de Down. Personas que están empleadas en labores de restauración de piezas arqueológicas y a su vez reciben una formación teórica y práctica en esta materia. Se trata de conseguir una rehabilitación psicosocial y laboral de las cuatro personas que ahora mismo están participando en el proyecto. Por su labor también reciben una pequeña recompensa económica semejante a una beca.
La idea surge hace más de dos años de una joven llamada Valentina con síndrome de Down. Su tía es Penélope Santa, restauradora que realiza su labor desde hace años en la Casa Municipal de Cultura de Yecla. “Valentina me inspiró porque me dijo que un día querría trabajar conmigo. Desde pequeña me ha gustado hacer trabajos manuales con ella y disfrutamos mucho de la relación tía y sobrina”, comenta Santa.
Esa especial vinculación entre ellas y la pertenencia de Valentina a la asociación Kapaces fueron los detonantes de esta idea de que se plantea como “una nueva opción en el mundo laboral de personas con diversidad funcional y una formación ligada al ámbito artístico”.
En el trabajo, los jóvenes se van formando en técnicas artísticas, teoría e historia del arte, dibujo, modelado y prácticas en técnicas de restauración. “Inicialmente, lo hacemos con material que no tiene valor artístico, pero cuando tienen competencias adecuadas se ponen a trabajar con obras reales con valor junto con técnicos que les tutorizan”, explica Penélope Santa.
Una de las personas que participa es Alejandra García. Esta joven tuvo un accidente que le causó un daño cerebral. “Me gusta porque aprendo cosas nuevas como dibujar. Además, en el grupo nos complementamos y hay un buen ambiente”, explica Alejandra a la que le gustaría, “seguir dedicándome a la restauración en un futuro”, comenta.
Una salida laboral y social
El ayuntamiento de Yecla y la asociación Kapaces van de la mano en este proyecto. Kapaces es una asociación que desde hace años trabaja en la rehabilitación psicosocial y laboral de personas con diversidad funcional.
El empleo de estas personas se proyecta como un medio para que las personas con diversidad funcional puedan participar en la sociedad para mejorar su autoestima y sintiéndose autónomos.
En este sentido, el ayuntamiento ya ha dado algún paso y quieren dar más. “Estamos viendo la posibilidad de contratar personal auxiliar para el museo arqueológico municipal y que pudiera ser alguna de las personas que están este proyecto. Tenemos que estudiar jurídicamente y laboralmente como se puede hacer con todas las garantías legales”, explica la alcaldesa de Yecla, Remedios Lajara.
“Lo idea es que todo desencadenara en una empleabilidad de los chavales y poder dar paso a nuevos equipos por el beneficio que supone para ellos”, comenta la restauradora, Penélope Santa quien también resalta la labor que hacen en el mantenimiento del patrimonio cultura de la ciudad de Yecla.
