La administración regional ya tiene sobre la mesa la última denuncia que constata la muerte de aves como el búho real a causa de las torres eléctricas. La Comisión Ambiental del instituto Azorín de Yecla y grupos ecologistas han denunciado reiteradamente la muerte por electrocución de distintas aves en el término municipal de Yecla porque algunas de las torretas que transportan la electricidad no tienen los sistemas de protección para evitar que se conviertan en trampas mortales cuando un ave se pose sobre ellas. Desde el centro educativo han contabilizado en el último año nueve búhos reales que han caído fulminados y cuyos cadáveres han sido encontrados en la base de varias de estas estructuras. Cabe recordar que el búho real se trata de una especie protegida por la ley, al igual que todas las rapaces, tanto diurnas como nocturnas.La profesora perteneciente a esta comisión, que está dentro de un proyecto nacional denominado Escuelas hacia la Sostenibilidad en Red (Esenred), Concha Martinez ha explicado que “uno de los alumnos encontró en mayo un búho electrocutado. Desde entonces estamos investigando y vemos que hay varios puntos negros en el término municipal. Uno de ellos está en la salida hacia Caudete, cerca del casco urbano. Y hemos visto más zonas con esta problemática, como otra torreta cerca de la depuradora. Han caído al menos nueve ejemplares, que nosotros hayamos cuantificado”.Junto a estos alumnos y profesores, el responsable de la Asociación Naturalista para la Investigación y Defensa del Altiplano (Anida), Fernando Rico ha colaborado en el seguimiento de esta problemática.
Cubrir el tendido eléctrico
La solución pasa por cubrir el tendido eléctrico en las torretas para que cuando se posen las aves no terminen electrocutadas. “Se deberían haber aplicado las medidas correctoras que obliga la ley a Iberdrola. En algunas torretas sí que están puestas, pero en otras no. No es un sistema costoso es más dejadez”, explica esta profesora.Estos colectivos han puesto en conocimiento de los agentes medioambientales de la zona la situación y han remitido un escrito a la Dirección General del Medio Natural de la Comunidad de Murcia hace ya más de un mes, pidiendo solución a este problema. “De momento no hemos tenido respuesta”, asegura Concha Martínez. Mientras tanto, los búhos siguen muriendo electrocutados.