La posible solución contratando a una empresa de impagos se convirtió en un problema. La Fiscalía ha reclamado penas que suman siete años y medio de prisión y dos multas que suman 13.900 euros para el responsable de una empresa de cobro de impagados que está acusado de apoderarse de doce mil euros que, presuntamente, percibió tras el encargo hecho por una firma de calzados de Yecla.
La Fiscalía asegura que la empresa denunciante, con sede en Yecla, encargó a un cobrador de impagos la gestión de un cobro por importe algo superior a los nueve mil euros. De conformidad con la manera de trabajar de la empresa de impagos, los gerentes de la empresa yeclana hicieron una entrega de 2.268 euros, importe de su comisión, lo que ocurrió en marzo de 2010.
Dentro de las actuaciones judiciales emprendidas por el acusado, éste consiguió que un juzgado de Madrid le entregara un total de doce mil euros recibidos del deudor y cuyo destinatario debía ser el empresario yeclano.
Sin embargo, siempre según la acusación estatal, el denunciado se apropió, presuntamente, de esa suma y, además, habría falsificado varios cheques para crear la apariencia de que las cantidades las había recibido un empleado ya fallecido.
El fiscal solicita para el responsable de la empresa de impagos cuatro años y medio de prisión y multa de 6.600 euros por un delito de apropiación indebida y otros tres años de cárcel y multa de 7.300 por un delito de falsedad, junto con una indemnización de doce mil euros.
