La Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de la Región de Murcia, ha confirmado la muerte de un ejemplar de azor debido a las heridas que le causaron varios disparos de escopeta.
Según explica esta asocaición, el pasado 5 de diciembre fue recogido el ejemplar de azor gravemente herido en un coto de caza del Altiplano, concretamente en el término municipal de Yecla, que finalmente murió. Ahora, la necropsia confirma la muerte por disparo de escopeta. de esta especie protegida
La Asociación Naturalista para la Investigación y Defensa del Altiplano (ANIDA) se ha hecho eco de estos hechos explicando que “el tiroteo de aves rapaces no es un fenómeno nuevo en la comarca, al que hay que sumar la proliferación de venenos, galgueros, furtivos, cepos y toda suerte de prácticas ilegales”.
Es el caso de un águila real tiroteada en dos ocasiones consecutivas en noviembre de 2015 al norte de Yecla, y otro individuo de la misma especie hallado muerto en extrañas circunstancias en el Monte Arabí en marzo de 2017, ambos sucesos denunciados en su día por ANIDA.
Desde ANIDA hacen un llamamiento público a las administraciones implicadas para que se actúe con la premura y diligencia necesarias para atajar estas actuaciones, “impropias de una sociedad civilizada. Extendemos este llamamiento a cualquier ciudadano que tenga noticia de este tipo de actuaciones para que avisen a las autoridades pertinentes; en este caso, a través del teléfono 112”.
Además, reclaman la implicación del colectivo de cazadores, “quienes tienen el deber de denunciar estos delitos y señalar a los culpables”. Y lanzan públicamente la siguiente pregunta a la Dirección General del Medio Natural: “¿Cuándo tienen previsto clausurar el coto donde apareció el ave tiroteada?”
Hay dos problemas; 1.- Problema Legal; se permite la caza. 2.- Problema humano; todavía existen retardados que no saben distinguir entre aves protegidas o otras aves y ante la duda, pasa lo que pasa.
Intolerable en pleno siglo XXl
En primer lugar agradecer a los agentes medioambientales y ANIDA de hacerse eco de que otra ave protegida, en este caso un Azor, ha sido abatida por disparos. Bien dice ANIDA que no es algo nuevo que esto se repite y la pregunta es; ¿dónde están los servidores públicos de este pueblo que no atajan estas barbaridades? Ah, que es cosa de Murcia, Dirección General del Medio Natural. ¿Alguién de aquí les dice algo a los de Murcia? ¡Que se pueden enfadar! Uff.
¿Donde queda la justicia, la fiscalía…estas cacerias son delito penal.
«No hay peor enemigo del derecho penal que la IMPUNIDAD»
Como ciudadano me siento agraviado por estos hechos.
La impunidad nos lleva al que matar aves protegidas y que «no pase nada» supone que estos atentados se volveran a repetir.
¡Que verguenza que pasen estas cosas!