Un paciente que sufrió cinco operaciones insatisfactorias en la rodilla realizadas en el hospital Virgen del Castillo no será indemnizado por la vía de la responsabilidad patrimonial de la administración porque su caso no suponía un riesgo vital para él. Descontento con la sanidad pública, acabó acudiendo a un centro privado para resolver el problema de salud.La resolución se recoge en el dictamen que, a instancias de la Consejería de Salud, emitió el Consejo Jurídico de la Región de Murcia (CJRM) en el que se propone desestimar la reclamación al no considerar probado que haya existido una mala práctica médica en la atención prestada en el Hospital Virgen del Castillo de Yecla.Los hijos del paciente, en la reclamación que presentaron contra el Servicio Murciano de Salud (SMS), aseguraron que la atención recibida por su padre no fue la debida. Tras someterse en abril de 2013 a una operación de prótesis de rodilla, tuvo que pasar hasta en otras cuatro ocasiones por el quirófano porque los resultados de la intervención no fueron los esperados. Cuando le indicaron que debía ser operado por en el mismo centro hospitalario, se negaron a ello y pidieron ser atendidos en otro privado, ubicado en Molina de Segura.El dictamen del CJRM señala que los informes aportados a las actuaciones descartan la existencia de una mala práctica, y, en concreto, el de la Inspección Médica recalca que surgieron una serie de complicaciones durante el tratamiento, incluidas en el consentimiento informado que el paciente suscribió en repetidas ocasiones.Este órgano consultivo dice que no había un riesgo vital que aconsejara al paciente y su familia acudir a la medicina privada, aunque considera “humanamente comprensible” que lo hicieran, acuciados como estaban por una patología de rodilla que no evolucionaba positivamente. Sin embargo, añade que no puede derivarse de ello una responsabilidad patrimonial para la administración sanitaria.