Menos vecinos de los esperados, unos 700, asistieron ayer a la concentración organizada para defender el Monte Arabí de la explotación porcina ideada por el Grupo Fuertes y El Pozo. El calor sin duda hizo mella, especialmente en quienes por la mañana fueron ‘in situ’ al lugar donde las máquinas están trabajando.
«Me siento orgulloso de ser yeclano», decía Soriano, el portavoz de la plataforma nada más tomar la palabra. «Esta concentración se ha preparado sobre todo para la gente que no ha podido subir esta mañana al Arabí. Sabemos que las vacaciones son sagradas, pero más sagrado es nuestro monte«, añadía.
[hana-code-insert name=’Adsense noticias’ /]
Asimismo, comentó que descubrieron las obras de El Pozo gracias a la paloma mensajera que hace unas semanas alertó falsamente de que había tres personas atrapadas en una cueva del mágico monte. «Al menos, la broma sirvió para eso», alegó.
Por el momento, parece que las obras se han parado por la falta de licencias, pero habrá que seguir peleando. «Si hace 30 año conseguimos que se parara la cantera que quería hacerse allí, cuando aún era monte privado, ahora que es público y patrimonio de la humanidad no será menos», decía Soriano ante el aplauso del público asistente.
Por último, añadía que «una empresa murciana, que se precia de cuidar lo nuestro, no puede atacar al único monumento natural de nuestra región».
Tras media hora de concentración y después de leer el comunicado redactado por la plataforma «Salvemos el Arabí», la manifestación se disolvió. Cabe destacar a su vez que participaron en la protesta prácticamente todos los concejales del ayuntamiento, pero ninguno bajo sus siglas, sino que lo hicieron a modo particular y sin dirigirse en ningún momento a la ciudadanía como portavoces municipales.
[hana-code-insert name=’Addoor’ /]
Mas de lo esperado, para un pueblo en el que todo nos importa tres cojones, salvo que nos afecte personalmente. Somos un pueblo insolidario, inculto y atrasado que no mueve un dedo para nada que nos afecte al global de la población.
Esto parece ser lo único que nos importa