El Concejal de Servicios Públicos, Ascensio Juan, ha pasado revista a diferentes actuaciones de la concejalía que dirige. Entre otros aspectos, ha explicado que en los primeros meses del próximo año terminará el actual contrato con la empresa concesionaria del servicio de limpieza y recogida de basura. En el nuevo pliego de condiciones el edil considera que hay que aumentar el servicio de recogida de enseres y de reciclaje ya que es claramente insuficiente el que hay en estos momentos.Los datos avalan esta necesidad puesto que el pasado mes de julio se depositaron en nuestra ciudad, en los contenedores de envases ligeros (bricks, latas y plástico) 57.700 kilos. Y en los de papel y cartón 65.000 kilos. En cuanto a retirada de enseres, ha destacado que en el mes de agosto se ha batido un récord con la recogida de un total de 117.000 kilos. Todos los miércoles y jueves en la tarde se han tenido que recoger los enseres depositados en el extrarradio. Esto supone que parte del personal de la empresa concesionaria tenga que dedicarse a estos cometidos, dejando su trabajo habitual de limpieza de la ciudad. Ascensio Juan ha explicado que el depósito de enseres, en la escombrera, durante el mes de agosto se debe a que el personal de la planta de recogida de enseres voluminosos, situada en Cartagena, donde se trasladan y clasifican, permanece de vacaciones, reduciéndose el servicio.
Limpieza ante la pandemia
Por otro lado, dentro de las medidas de prevención por la Covid-19 se está procediendo a la desinfección continuada de todos los parques infantiles. Esto ha supuesto un gasto añadido de 5.500 euros. En este sentido ha querido recordar que “los juegos infantiles se vienen limpiando en nuestra ciudad desde hace 5 años de forma regular”.También ha querido destacar que se viene produciendo la desinfección continuada de los más de mil contenedores de residuos distribuidos en el casco urbano de nuestra ciudad. Ascensio Juan ha explicado que “el lago del Cespín se limpia en profundidad, dos veces al año, vaciándose y llenándolo completamente. Incrementar el número de limpiezas anuales supondría también un derrote de agua”. Respecto a la suciedad, el edil ha dicho que es normal. “Si quieren les llevo un pez y una tortuga a la bañera de su casa y unos días después me cuentan cómo se queda el agua”. El concejal ha indicado que existía un proyecto que podría ayudar a solucionar esta situación, que ha tenido que ser aplazado por otras prioridades generadas por la Covid-19. Se trata de reducir la extensión del lago, construyendo un pequeño auditorio para actuaciones musicales en la zona eliminada del lago.
Eso pasa por poner a cualquiera sin cultura ni formación académica de concejal. Tenemos lo que merecemos. A disfrutar lo votado
Para cambiar algo lo primero es reconocer la necesidad de cambiar. El concejal empieza bien reconociendo que el servicio no funciona. Recogida de enseres deficiente, contenedores llenos, punto limpio… un desastre.
Me pido cita para la desinfección del contenedor de por mi casa.
Ya tengo la tortuga en la bañera. Ya le cuento. Hay veces que el agua del lago del cespín es chocolate.
Me quedo con la idea de reducir la extensión del lago como formula de gastar menos agua. Brillante idea solo queda extenderla a los cultivos intensivos para no cargarnos los acuíferos en un espacio corto de tiempo.
Conclusión, que el ayuntamiento se debe poner las pilas con este servicio elemental y necesario para la ciudadanía.
Ya ha dado el primer paso, reconocer que no funciona bien, el segundo paso llevarlo a efecto.
Esperemos resultados.
«Construir un pequeño auditorio para actuaciones musicales en la zona eliminada del lago.» ¿Es necesario? ¿Cuantos auditorios al aire libre hay ahora mismo en Yecla sin uso? Yecla Valora hay uno, detrás de la Iglesia Vieja otro….