Teresa y Celia van a cursar sus estudios universitarios en las carreras que quieran. Sus notas les permiten acceder a lo que se propongan, pero prefieren intentar cumplir el sueño de ser lo que de verdad les apasiona. Estas dos chicas han obtenido las mejores calificaciones de los casi 190 alumnos de Yecla que se presentaron hace unos días a las pruebas de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU).Una de ellas es Teresa Serrano. La alumna del Castillo-Puche obtuvo un 9,97 en la prueba general de la EBAU, tiene un 13,93 de nota global para acceder a la universidad y obtuvo un 10 en el bachillerato. La otra chica con mejores calificaciones es Celia Harris. Estudiante del instituto Azorín, ha obtenido un 9,94 en la prueba general de la EBAU, tiene un 13,8 en la nota global para acceder a la universidad y también tiene un 10 en las notas que ha obtenido en el bachillerato.Los exámenes realizados en Jumilla no han sido del todo complicados. “En el curso he tenido buenas notas, pero no me esperaba un resultado así en la EBAU. Había más opciones para elegir, en eso era más fácil que otros años, pero el examen de Química era más difícil que en otras ocasiones”, asegura Teresa sobre su experiencia.Para Celia, la EBAU no le pareció difícil porque lo tenía todo muy mascado.”Sí que era más fácil aprobar que otros años, pero a la hora de sacar buenas notas había que esforzarse mucho más”. Teresa quiere ser médica. Para lograr entrar en la Facultad de Medicina de Madrid, donde ella quiere estudiar, tiene que tener un 13,4 de la nota global, algo que no va a ser un obstáculo. “Tuve una crisis y pensé en estudiar un doble grado de matemáticas y física…pero he vuelto a mi idea inicial que es la medicina”. Ese doble grado en la Complutense fue la carrera con mayor nota de corte el pasado año: 13’875. Aun así, su sueño es especializarse en neurocirugía una vez que termine sus estudios. “Siempre que se pueda hay que estudiar lo que uno quiera porque le guste. A lo mejor lo que hoy tiene trabajo dentro de cinco años no. Hay que elegir lo que te guste”, asegura esta joven estudiante que asume las dificultades que tendrá una vez que termine su formación para trabajar de médica en España con unas buenas condiciones laborales. “Tenemos unos buenos profesionales formados en Medicina pero no se les da la oportunidad. En otros países como Alemania los médicos españoles están muy bien considerados”, asegura la joven que a lo mejor tiene que coger las maletas para ejercer fuera de su país si finaliza su formación en Medicina.Por su parte, Celia quiere estudiar un doble grado de Infantil y Primaria. “Pilla por sorpresa a muchas personas lo que quiero estudiar, pero es por lo que me esforzado. Se requiere un 12.15 que lo tengo de sobra, pero no voy a mirar lo que tenga mayor nota de corte. Voy a hacer lo que quiero hacer, lo que he querido hacer de pequeña, es la mayor suerte que tengo”, explica Celia que tiene una gran vocación por la docencia. “No quiero otra cosa. Es lo que más me atrae”, explica una joven que tiene a su madre, profesora, como ejemplo a seguir.Para Celia el estudiante tiene que apostar por las carreras que le gusten aunque “uno tiene que ser realista, hay ciertas carreras que cada vez tienen menos puestos de trabajo. En Educación hay mucho paro, pero si de verdad lo quieres el esfuerzo se hace para cumplir mi sueño. La vida es esfuerzo”.
A las dos les espera una nueva vida fuera de Yecla donde tendrán que seguir trabajando duro por conquistar sus objetivos académicos y un día ser lo que ahora les hace más ilusión.
