La consejería de Medio Ambiente de la Región de Murcia apuesta por el reciclaje de los residuos orgánicos. Para ello, ha lanzado un proyecto piloto que llegará antes de fin de año a los municipios de Yecla, Jumilla, Molina de Segura y Águilas.
Pero no será igual para todas las localidades seleccionadas. Según ha informado el consejero Javier Celdrán en rueda de prensa, Águilas y Jumilla tendrán el sistema de recogida puerta a puerta de residuos orgánicos. Águilas, a su vez, tendrá también el de compostaje comunitario. En Yecla se apostará por el autocompostaje, mientras que en Molina de Segura se instalará un quinto contenedor, el marrón, como modelo de recogida de residuos orgánicos en grandes urbanizaciones.
Pero, ¿qué son los biorresiduos domésticos?
Según ha informado el consejero de Empleo y Medio Ambiente, Javier Celdrán, acompañado de la directora general de Medio Natural, Consuelo Rosauro, este tipo de contenedores (ya sea en la vía pública o en las viviendas) será, exclusivamente, para materia orgánica, es decir, para restos de comida y de plantas.
«Estos desperdicios se convertirán en abono fertilizante y en alimento para plantas de biogás, para producir así más energía», asegura el consejero.
En resumen, los biorresiduos domésticos son los residuos orgánicos biodegradables de origen vegetal y/o animal, susceptibles de degradarse biológicamente generados en el ámbito domiciliario y comercial (siempre que estos últimos sean similares a los primeros, como bares o pequeños restaurantes).
Los biorresiduos según su naturaleza se dividen en:
- Residuos orgánicos de origen alimentario y de cocina (se incluyen los de transformación de alimentos).
- Residuos vegetales o Fracción Vegetal procedentes de las zonas verdes y vegetación privadas y públicas de tipo no leñoso (ramos de flores mustios, malas hierbas, césped, pequeñas ramas de plantas, hojarasca, etc.). Los restos de poda de árbol deberán llevarse, como hasta ahora, a un punto verde, pues por sus características requieren de un tratamiento diferenciado.
Según ha confirmado el consejero, tal y como ha recogido econoticias.com, «a partir de noviembre se licitará la puesta en marcha de estos cuatro proyectos piloto para que, de cara al próximo año, podamos tener las diferentes formas de trabajar con los residuos orgánicos probadas y extendidas al resto de municipios».
Y es que, según datos de Celdrán, en la Región se generan 650.000 toneladas de residuos domésticos de forma anual, de los cuales, un 39% equivale a residuo orgánico. Por último, el consejero, que ha presentado esta iniciativa coincidiendo con el Día Mundial del Reciclaje, ha remarcado que «todos debemos contribuir a que la sociedad sea más sostenible y respetuosa con el medio ambiente«.
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¿En qué consiste el autocompostaje?
Yecla ha sido elegida para impulsar el autocompostaje. Ayuntamientos como el de Terrasa o el de León ya cuentan con este servicio que funciona bastante bien entre los vecinos de dichas ciudades.
Compostar es someter la materia orgánica (restos de comida y vegetales de jardín) a un proceso de transformación biológica en la que millones de microorganismos actúan sin descanso, por lo que obtenemos nuestro abono natural: el compost.
El compostaje es un proceso simple que mediante un sencillo aprendizaje se puede realizar en el mismo lugar donde se ha generado la materia orgánica: en casa, si se dispone de jardín o patio, pero también en la escuela, institutos, centros recreativos, etc. , como interesante experiencia educativa.
Aunque todavía no se ha explicado cómo funcionará en Yecla este proceso de reciclaje, ayuntamientos como el de León lo organizan de la siguiente manera: 
Es decir, a las charlas informativas para explicar cómo se ha de llevar a cabo este proceso de autocompostaje, se suma la solicitud y entrega de un contenedor específico donde realizar el compost.
En la capital leonesa sí se pide que se haga en lugares donde haya tierra (casas de campo, jardines en viviendas, patios…). Sin embargo, el Ayuntamiento de Terrasa también permite autocompostar en pisos gracias a unos vermicompostadores que tienen a disposición de los vecinos y vecinas de la ciudad. Este sistema permite llevar a cabo, en cualquier casa o piso un proceso de transformación de los restos de comida en abono natural, con un formato limpio, fácil y sin complicaciones.
Pero, ¿por qué compostar?
Pero, ¿por qué compostar?Especialmente, para colaborar en la reducción de residuos que diariamente generamos. Seguro que el medio ambiente lo agradece. Además, por cada 100 kilos de restos orgánicos podemos obtener 30 kilos de abono gratuito para nuestras plantas o árboles.
Asimismo, contribuiremos a la reducción del peso y el volumen de la basura que van a parar a los vertederos y las incineradoras, con la consecuente mejora ambiental.
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