El Yeclano Deportivo pensaba que iba a conseguir una tonelada de goles y al final lo que consiguió fue pedir al árbitro que pitara el final porque el colista se lo puso bastante complicado. El resultado del encuentro disputado en la Constitución fue 2-1 frente al equipo del Algar.Victoria justa, merecida, pero bien es cierto que mucho más complicada de lo que a priori dicen las matemáticas en la clasificación de este grupo tercero de la tercera división del fútbol español.Un partido entretenido sobre todo porque los visitantes plantaron cara al Yeclano que salió al terreno de juego con el síndrome del líder que se enfrenta al colista. Es decir, que en los primeros minutos había que meter por lo menos un par de goles y terminar el partido con una sonada goleada. Podemos calificarlo como el síndrome de la ansiedad por una victoria cantada.Pero no fue así. El Yeclano empezó el partido presionando, con un juego directo que le dio bastantes posibilidades para haber inaugurado el marcador.
Fue en el minuto 30 cuando una internada por banda derecha de Fenoll provocó un centro que remató espectacularmente Álex Vaquero con una tijereta en el aire que supuso el 1 a 0 en el marcador.El propio Alex vaquero tuvo algunas ocasiones más para poder ampliar la victoria del Yeclano que empezaba a encauzarse. Sin embargo, el que conseguiría un gol sería el equipo visitante. Javi Roca aprovecha por la banda derecha un mal marcaje para rematar cruzado y conseguir el empate a uno con el que se irían los jugadores al vestuario.Esa ansiedad por conseguir muchos goles le estaba provocando problemas al Yeclano Deportivo que se veía superior a su rival pero eso no se demostraba en el marcador.Y además en el minuto 35 Joselu veía la segunda amarilla por lo que el Algar se quedaba con 10 jugadores.
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En la reanudación, más de lo mismo. El Yeclano lo intentaba por banda, con centros, con perpendicularidad pero no consiguírían batir de nuevo la portería del guardameta visitante hasta el minuto 15 de la segunda mitad
Una espléndida penetración de Mario por banda derecha permitió a Iker Torre rematar el balón al fondo de la red. Era el 2-1 que sería el definitivo en el marcador. El delantero del Yeclano que de nuevo veía gol en una temporada que está siendo complicada para él, ya que no logra marcar con facilidad tal y como sí le pasó en la temporada 2017/2018.
El Yeclano tuvo más oportunidades para subir al marcador algún tanto más pero la fortuna unas veces y el portero en otras fueron los obstáculos para que el resultado fuera muy ajustado a lo largo de la segunda mitad.
Esa circunstancia provocó el nerviosismo porque en cualquier momento, en una jugada aislada, en una falta innecesaria o en un contraataque los visitantes podían igualar el marcador.
Ninguna de esas circunstancias se dio pero sí que es cierto que al final el público pidió la hora al árbitro ante el riesgo de un empate frente a un rival que, pese a ser el colista, en La Constitución demostró ser un equipo muy combativo.
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