Se quedó dormido al volante de su coche que estaba encendido, con las luces puestas y situado en medio de la calle. Eran las 4 de la madrugada del pasado domingo. En la calle San Ramón de Yecla había un coche parado de forma perpendicular a la calle que impedía el paso al resto de vehículos. Varias llamadas de vecinos avisaron a la Policía Local que mandó una patrulla a la zona para averiguar qué estaba pasando.
Allí, los agentes se encontraron un turismo encendido, con las luces puestas y en el interior un hombre al volante que estaba profundamente dormido. “Se procedió a la apertura de la puerta, intentando despertar al conductor, no siendo posible, pues no reaccionaba a ningún estímulo dado al estado de embriaguez en el que se encontraba”, relatan los agentes que acudieron.
Tras insistir, finalmente consiguen que escapara de los brazos de Morfeo pero lo que pasó en ese momento no se lo esperaban los agentes. El conductor no tenía puesto el freno de estacionamiento y al mover su pie del pedal del freno el vehículo empezó a moverse sin control cuesta abajo ya que había una pendiente en la zona. Varios agentes, tanto de Policía Local como de Policía Nacional, tuvieron que lanzarse a frenar el coche con sus brazos mientras que uno de ellos pudo introducirse por la puerta del copiloto y accionó el freno de mano antes de que se fuera cuesta abajo y provocase un accidente o terminara colisionando con los otros vehículos estacionados en la calle.
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El conductor pudo ser identificado por la policía. Se trata de un varón, de 44 años de edad, de nacionalidad extranjera y vecino de Yecla. Los agentes consiguen despertarle y le propusieron que debía realiazr la prueba de alcoholemia aunque “presentana síntomas evidentes de que iba influenciado por bebidas alcohólicas”, relatan desde este cuerpo de seguridad.
El resultado fue el que se preveía. El conductor cuadruplicaba el resultado máximo permitido de consumo de alcohol para coger el volante, por lo que los agentes le leyeron sus derechos y le trasladaron hasta la jefatura de la Policía Local donde pudo dormir a gusto y a pierna suelta en el calabozo antes de pasar a disposición judicial por un presunto de delito contra la seguridad vial.
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Deberían poner multas más fuertes para este tipo de casos, por alcohólicos muchas personas han perdido a vida sin ser su culpa.
https://cumbrepuebloscop20.org/medio-ambiente/ecosistemas/acuaticos/
Interesante:
https://elperiodicodeyecla.com/obras-piscina-ciudadanos/
Para control de alcolemia el que habría que hacer antes de escribir un artículo, el autor presentana ciertos síntomas. Me sangran los ojos cual mosquito aplastado.
Increible, cualquier cosa que se diga, no pasan mas cosas porque no pasan.
Y esto ya, para partirse el ojete. Un saludo Séneca.
Extranjero, a lo sabía.
Eso no le pasaría a ningún español, ¿Verdad? ¡Ah! Por cierto. Aprende a escribir.