La Asociación de Amigos de la Música de Yecla concedió el pasado domingo el concierto de Santa Cecilia. Como cada año, en este importante concierto se hace entrega del Premio Santa Cecilia que, en esta ocasión, recayó en el compositor holandés Ed de Boer, conocido por su seudónimo Alexander Comitas.
La relación de Comitas con la Asociación de Amigos de La Música se inició en el año 2014, cuando por iniciativa de la propia Asociación y la Concejalía de Cultura, a través de su Museo de Réplicas del Greco y para conmemorar el IV Centenario de la muerte del pintor, se le encarga una obra para una orquesta sinfónica de viento, basada en el cuadro del pintor cretense «El Entierro del Conde Orgaz«.
La obra fue estrenada por la Banda de la Asociación de Amigos de la Música en un memorable concierto ofrecido en el Alcázar de Toledo, el 18 de octubre de ese año. La pieza escrita y dedicada al director de la banda, Ángel Hernández, fue el principio de una estrecha y fructífera relación, que ha contribuido sin lugar a dudas a dar prestigio internacional a nuestra banda.
Este año, la Banda estrenó otra obra suya
Además, este prestigio se vio de nuevo reafirmado el pasado 8 de abril cuando la banda estrenó a nivel mundial en el Auditorio «Víctor Villegas» de Murcia una de sus creaciones, titulada «March of Iskandar-Khan Op. 81b«.
Desde su primer contacto con Yecla, Alexander Comitas y su esposa Maaike han visitado nuestra ciudad en numerosas ocasiones. Tanto para seguir los ensayos de la banda de cara a sus estrenos, como para participar de nuestras fiestas, las cuales han disfrutado como unos yeclanos más.
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Actos de Santa Cecilia
Con este concierto extraordinario dan por concluidos los actos de Santa Cecilia 2018, que tuvieron como momento culmen la recogida de nuevos músicos. En esta ocasión, Olga Muñoz (violoncelo), Hugo Gil (clarinete), Laura Rico (saxofón) y Ana Inés Ortuño (saxofón) fueron los granes protagonistas, convirtiéndose tras este acto en nuevos músicos de la banda.
Asimismo, la banda vivió dos momentos muy emotivos durante la recogida. El primero, se vivió frente a la casa de El Ñoño, músico estandarte de la banda y fallecido este mismo año. La banda, al pasar frente a su domicilio, se giró, ante las persianas bajadas, y dedicó unos segundos de entrañable reconocimiento.
El segundo se vivió en casa de la socia María José Puche, que, por sorteo, fue la homenajeada en este desfile. Por segundo año consecutivo, la banda va a casa de uno de sus múltiples socios para agradecer tantos años de fidelidad a la asociación. María José, entre lágrimas, agradeció el gesto a los músicos y a su director.
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