En los años 80 del pasado siglo, en España, repartidos por toda la geografía se construyeron un número considerable de hospitales comarcales. Los objetivos principales fueron la desmasificación de las grandes residencias sanitarias de la época, así como en el caso de Yecla, que para una distancia de 100 km. hasta Murcia. Eran aquellas carreteras bastantes precarias, donde el viaje duraba más de hora y media, y algunas personas fallecían en el camino con la impotencia de no llegar a tiempo, las generaciones de entonces, lo sabemos bien.
Nuestra antigua “residencia sanitaria”, fue un logro de la reivindicación de la gente. Incluso la vieja Arrixaca -hoy Morales Meseguer- se quedó pequeña y se levantó en El Palmar, la actual, la mayor referencia sanitaria y universitaria en la comunidad, también muy destacada a nivel nacional.
El otro día después de desayunar con María Ángeles Gómez y Verónica Maqueda, nos dimos una vuelta por nuestro hospital, esta vez me he puesto el listón muy alto. Ellas son doctoras jubiladas del centro.
María Ángeles es natural de Santo Ángel en Murcia; es Pediatra y han sido muchos desde que en 1981 llegó a Yecla, hasta su merecida jubilación, los centenares de niños que han pasado por sus manos.
Verónica, granadina de nacimiento y también yeclana de adopción; es Radióloga y se incorporó un poco más tarde en dos etapas, tras la Fe de la Valencia y el Hospital de Elda, pasando por la amplia formación global de su ojo clínico, más radiografías que la cámara de fotos del reportero más famoso. Ambas pertenecen a AMAS, el colectivo de personal jubilado y en activo de nuestro hospital.
Hospital comarcal
Nuestro hospital que abarca una densidad de población de 60.000 personas entre Yecla y Jumilla, está demasiado débil y tiembla ante los ojos de la gente y nos estaba avisando. La mala planificación y gestión de los recursos, engrosando los servicios de los hospitales de referencia y mermando el servicio de los comarcales, creo que no es la solución.
Si los hospitales comarcales se crearon por el desaparecido INSALUD para cumplir la función de descongestionar y acercar a los facultativos a los pacientes, ahora, por qué decisión extraña, me dicen, se revierte esa técnica en la sanidad.
A la sanidad hay que protegerla de las inclemencias de la política. Que no se dejen algunas medidas provisionales como para salir del paso en definitivas, gobernando a salto de mata.
La carrera profesional son escalones y los peldaños son los puntos que reconocen los méritos. Que los hospitales comarcales, por año trabajado puntúen más. No puede ser que se gane más de guardia que de sueldo. Las leyes cambian cuando quieren los políticos, si hay voluntad política para ello.
A la lógica de la vida y de la muerte, hay una amenaza perpetua de falta de médicos. Hay quienes están tan desconectados del mundo, que parece que ignoran los peligros a los que el mundo de las personas de a pie se enfrentan. Los médicos también han aprendido con el aprendizaje del dolor, como arte que no se olvida.
Trabajar para erradicar o aliviar las enfermedades es la tarea de los profesionales sanitarios, y defender a un hospital indefenso por sí solo, está en nuestras manos. Por lo cual ante el modelo implantado en su día, no debemos permitir ningún retroceso.
Administración de la sanidad
Cuando hay un problema, a veces solo se vislumbra el contorno porque desconocemos lo que hay dentro. Es intolerable que la administración regional no muestre mayor empatía e infravalore a los hospitales comarcales, especialmente al de Yecla. Parece ser que en un espíritu de ambición quieren dotar al Hospital Morales Meseguer de mayor número de pacientes, entre ellos enfermos del Altiplano, buscando más recursos por volumen, concedido el aumento de ampliación, en lugar de hacerlo implantando más medios en este caso en el Virgen del Castillo.
Me cuentan que el Servicio Murciano de Salud en su definición lleva implícito su menester. Servicio a todos los pacientes que dependan de él. Murciano, a todos aquellos que vivan en la Región de Murcia o en un momento dado puedan hacerlo.
Salud, por la calidad de vida de las personas, y sobre todo la base de la materia prima, estimular cuanto sea necesario, las prestaciones de las consultas de Atención Primaria, cuna de toda la vida del médico de cabecera.
Para que parezca que hacen algo y no hacen nada, solo de cara a la galería, es inadmisible que plantillas pagadas por nuestra Área V, trabajen en Murcia. Mientras, aquí tengamos mediante este sistema que se pretende implantar, una especie de “médicos y jefes virtuales”, con la connivencia de la administración y una captación de plazas que conlleva que vengan los especialistas con cuenta gotas. Queremos lo que teníamos y no esta ocurrencia de las áreas funcionales.
Alianza por la sanidad
Para finalizar, pienso, que médicos solo pueden ser unos pocos, pero pacientes lo somos todos cada día. Ellas como facultativas y dilatada experiencia, y yo como simple usuario, sabemos que ha sufrido un declive volviendo atrás en muchos aspectos.
Debe haber una alianza entre el pueblo y su hospital. Cuidemos la sanidad. Aquí importa la salud del paciente, y es la política la que tiene que guardar cola o lista de espera de cuatro o cinco meses, no cabe otra receta, ningún corazón debe ser ajeno a ello.
De todo esto y algo más, se hablará en una mesa informativa muy trabajada e ilustrativa prevista para el próximo martes 5 de Julio, a las 8 de la tarde convocada por AMAS y 15 entidades socio/sanitarias, en el Auditorio Municipal.
Artículos de José Antonio Ortega
Buen articulo Jose Antonio, con un análisis más o menos certero de la situación; pero olvidamos lo principal: LOS MÉDICOS Y ESPECIALISTAS NO QUIEREN VENIR A YECLA. Esa es la única verdad y lo sé de primera mano.
Al final solo nos quedan médicos de otros paises (normalmente sudamericanos) con preparaciones a veces muy deficientes. Por tanto el problema es que como pueblo tenemos poco ó nada que ofrecer y el SMS no puede a nadie obligar a trabajar donde no quiere. Es triste pero es así. Lo demás pamplinas……….
Gracias por explicar lo que pasa. Ahora se trata de revertir las decisiones de algunos pocos que están perjudicando a muchos.